Sobre la cadena de custodia
“Lo vengo siguiendo periodísticamente, teniendo una mirada como observador y profesional. Hay cuestiones que uno se pregunta a nivel investigativo, hasta qué punto la investigación puede cometer algunos errores”, manifestó Di Lollo.En ese sentido, el abogado se pregunta sobre la cadena de custodia con respecto a dos elementos de prueba que son el arma y el teléfono, pero sobretodo del teléfono que permite recolectar información para ver qué pasó antes.
“Hay cosas que uno se pregunta el tema de la cadena de custodia desde que el arma es tomada. Fue encerrada la persona en cuestión. Luego me planteo qué pasó con el arma. Qué pasó luego cuando se intento extraer la información de primera mano del teléfono. Cómo sale de la órbita del juzgado”, planteó.
El traslado del celular
En esta dirección, expresa que el sobre donde se trasladaba el celular estaba abierto mientras era trasladado por la policía aeroportuaria, “pero el secretario no habría dejado en actas este momento. Entiendo que el sobre tendría que haber sido cerrado antes de ser trasladado. Y después no se sabe si ese celular estaba en modo avión o no, lo cual es fundamental”.Sobre el celular, el abogado apunta la importancia de saber si el teléfono estaba en modo avión o no: “Porque cuando se lo pone en ese estado, lo que sucede es que no se puede acceder de forma virtual a su información para ser borrada”.
“Vamos a suponer que el teléfono se hubiera reseteado, evidentemente lo que sigue es la extracción física para poder acceder a la nube. Creo que por eso se trasladó el teléfono a la policía aeroportuaria”, indicó.
Sobre el arma, el profesional entrerriano sostuvo que lo que importa si es apta para disparar, ya que el hecho de que hubiese tenido una bala en la recamara o no, no supondría un atenuante. “Solo habla del grado de aptitud en su uso por parte del sujeto”.
Y finaliza: “La imputación puede cambiar en todo momento, en la medida en que se conozcan más pruebas”.
