-¿Cómo fue la participación del Museo Provincial Antonio Serrano en el rescate de los restos fósiles encontrados en el arroyo Perucho Verna?
-Cuando nos avisaron del hallazgo buscamos si en el sitio había alguna institución científica que ya tuviese concesionada el área para investigación para no superponernos, de acuerdo a la Ley 9686 de Preservación del Patrimonio Arqueológico Paleontológico.
Justamente en Gualeguaychú también había surgido un hallazgo y el área está concesionada a parte del equipo del CONICET de Diamante. Solo pueden hacer ese trabajo arqueólogos que estén en el área.
Enviamos allí a Brenda Ferrero, que fue quien se hizo cargo de la extracción del material. La zona era muy difícil para trabajar porque estaba muy cerca del cuerpo de agua, por lo que el material se encontraba en un estado muy frágil.
-¿Qué precisiones puede darnos del material encontrado?
-Falta el informe final, pero ya nos enviaron uno preliminar y unas fotos. Según lo que nos contaron, es un cráneo de mastodonte, consecuente con lo que había encontrado un particular.
-Se avisa a la autoridad de aplicación de la ley y hacemos la derivación o directamente vamos nosotros. Como ya había un equipo trabajando en el área, aun cuando sea con otros objetivos, tratamos de que vaya el mismo para ampliar las investigaciones que ya tienen en esa zona.
Al tratarse de patrimonio provincial hay una ley que establece que la autoridad de aplicación es la Secretaría de Cultura de Entre Ríos, a través del museo Serrano, por ser un organismo especifico en la materia.
Ante el hallazgo de un material, puede ser que nos avise un particular o incluso el propio CONICET y nosotros les decimos si pueden ir a rescatarlos, porque ellos saben que puede haber otros investigadores en la provincia.
-Muchos de nosotros no tenemos conocimientos sobre el tema, quizá no estamos seguros si se trata o no de restos fósiles y tampoco sabemos qué hacer y qué no. ¿Cuáles son las recomendaciones?
-Lo que no hay que hacer es retirarlo del lugar, ya que puede estar el ejemplar completo y se rompe.
Sí pueden tomar fotografías, y deben sacar la ubicación de las coordenadas para enviarlas al museo. Nosotros determinamos en primer lugar si se trata de un fósil, porque suele pasar que hay organismos muy grandes sin llegar a ser fósiles, o se trata de rocas calcáreas que se confunden con un hueso.
Entonces, de acuerdo al lugar de la provincia, puede ir un equipo de investigación que ya esté en la zona o vamos nosotros para hacer el rescate.
Si fueron encontrados en un predio privado necesitamos autorización del dueño. -¿Este tipo de hallazgos son comunes en nuestra provincia?
-Sí, son muy comunes. Entre Ríos es riquísima en este material. En lo que va del año debe ser el quinto hallazgo, y siempre estamos recibiendo denuncias. Generalmente es la megafauna del cuaternario la más presente, y el mastodonte ya ha aparecido varias veces en el año, en distintos lugares de la provincia.
-¿Cómo puede ser que estos restos se hagan visibles después de 10 mil años, o que al menos no se hayan descubierto antes?
-Porque los retransporta el agua. Generalmente estos materiales están asociados a un curso de agua. Cuando la velocidad de corriente erosiona el lecho, sea de un arroyo o del mismo río, los va dejando en descubierto. Muchas veces los encontramos debajo pero estaban mucho más arriba y cuando se produce el desmoronamiento, lo que se llama la remoción en masa, hace que el material que está en la superficie caiga por efecto de la gravedad, apareciendo en el lecho.
-¿Estas piezas son patrimonio de Entre Ríos?
-Así es, pertenecen a todos los entrerrianos, por eso debe estar resguardado en museos públicos y los protege una ley provincial, concordante con una ley nacional. Este material no es de quien lo encuentra. La comercialización está penada. Este año ya hemos tenido allanamientos por ofrecerlo a la venta a través de internet; por ejemplo hubo uno en Villa Libertador General San Martín. Se trata de un delito federal.
-¿Dónde permanecerán los restos fósiles encontrados en Pueblo Liebig?
-En principio, se llevan para hacerles una limpieza. La Ley 9686 establece en uno de sus artículos que si hay un museo o uno en formación, y si las condiciones de seguridad lo permiten, el material quedará en la zona, luego de su limpieza, consolidación y estudio.
La autoridad de aplicación, o sea nosotros, determinamos dónde va ese material.
