Atención

Esta imágen puede herir
su sensibilidad

Ver foto

Compartir imagen

Agrandar imagen
(Período 02-01-1893 hasta 21-07-1894)

POR LORENA MUÑOZ
lorenakatar@yahoo.com.ar

El doctor Alfredo Arines fue una figura muy significativa en el Colón de antaño. Desarrolló su profesión en diferentes ámbitos. Se desempeñó como Médico Municipal entre 1888 y 1891; en 1892 trabajó como médico de la Sociedad de Socorros Mutuos “Italiani Uniti”, institución que se había formado en nuestra ciudad. Más tarde, continuaría su labor dedicándose a atender a los sectores sociales más desfavorecidos, en el Hospital de Caridad de Concordia.

El doctor Arines fue parte del grupo de hombres que había colaborado para la fundación de la Biblioteca “Fiat Lux” por el año de 1876, una institución primordial para el desarrollo cultural y educacionista del pueblo. La misma, se constituyó como proyecto impulsado por la Logia Masónica Cristóbal Colón, su denominación “hágase la luz” muestra las inquietudes y deseos de este grupo de hombres, que vieron la necesidad de instruir al pueblo y de elevar sus conocimientos. En 1890 el Doctor Alfredo Arines ocupa el cargo de Presidente de la comisión directiva de esta Biblioteca.

En julio de 1888 el Honorable Concejo Deliberante lo nombra para des-empeñarse como médico municipal. En 1889, es elegido como suplente para integrar el HCD. Para diciembre de 1890 continúa desempeñándose como médico municipal. Finalmente, el 4 de diciembre de 1892 Don Alfredo Arines resultó electo para desempeñar el cargo de Presidente Municipal para el próximo período.

El 2 de enero de 1893 comienza su trabajo como Jefe del Ejecutivo. In-mediatamente se ocupa del problema de extinción de las langostas, en un momento álgido de la irrupción de la plaga. Pasado casi un año, el 15 de diciembre 1893, y siguiendo con el recurrente problema de estos insectos, el HCD acordó en dicha sesión la necesidad de que se hagan publicaciones imponiendo penas a los que no maten langostas que aparezcan en sus propiedades y que se dé el aviso correspondiente, así como era obligación del que no tenga en su propiedad, ayudar a sus vecinos.

En ese mismo mes se nombra como farolero municipal a Francisco Gomez y en el puesto de Comisario municipal a Don Antonio Feijoo. El presidente municipal nombra como Jefe del Registro Civil al escribano público Don Juan Esteva y Roca, en reemplazo de Agustín Correa. Al mismo tiempo designa para el puesto de secretario municipal a Don Ramón M. Noailles. En el puesto de tesorero, y ante la renuncia de Don Arturo Ahumada, Alfredo Arines nombra a Don Cleofe Caligas. En estos momentos ocupaba la presidencia del HCD Don Apolinario Sanguinetti, y ejercía como Juez de Paz del Departamento Don Leopoldo Duconquere.

En junio de 1893, Don Alfredo Arines pone en conocimiento de Apolinario Sanguinetti una inquietud respecto de la participación de la corporación para ayudar en la construcción de un hospital. La nota se expresa en los siguientes términos: “Al Sr. Presidente del HCD, Don Apolinario Sanguinetti. Acerca del propósito que tiene la Sociedad de Beneficencia de esta ciudad de fundar un hospital. Es una necesidad sentida hace mucho tiempo en este Departamento y que la Municipalidad no puede ver con indiferencia, como no debe tampoco dejar librada a sus propios esfuerzos a la meritoria comisión de señoras que, desde hace años y con tantas dificultades, han sabido atender la Beneficencia domiciliaria, además de ahorrar una cantidad que les sirva de base para atacar la idea tanto tiempo acariciada de la construcción de un hospital. Juzgo pues oportuno el momento para que mande una parte activa esta municipalidad, sepa ayudar a la sociedad de beneficencia con una cantidad para la creación de este edificio. Y según los ingresos habidos hasta la fecha, podremos contar con que los ingresos superarán en algo a lo presupuestado, así que me atrevería a calcular disponer de 500 a 600 pesos. Acabamos de ver como los particulares han sabido contribuir al llamado de la Sociedad de Beneficencia. Y es indudable que tiene que estar fija la atención de este vecindario hacia la actitud que la municipalidad tome. Espero que el HCD tomará en consideración el presente mensaje.”

El 14 de julio de 1894 los concejales asisten a una sesión en la que se tratará, en primer término, la renuncia `presentada por el Presidente Municipal Don Alfredo Arines. Recién el 21 de julio, reunido en sesión extraordinaria, el HCD acordó aceptar su renuncia. Finalmente, y tomando en cuenta el consejo del intendente , en esa misma sesión se resolvió, al tratarse el nuevo presupuesto, que se establezca una ordenanza donando la suma de 1000 pesos de las entradas del próximo año a la Sociedad de Beneficencia, para ayudar a la construcción del Hospital.

El doctor Alfredo Arines se trasladó a Concordia, allí hacia 1895, se desempeñó como médico en el Hospital llamado “Pura y Limpia Concepción” de esa ciudad, más conocido por todo el pueblo como “Hospital de Caridad”. Junto al Dr. Felipe Heras, Arines formaba parte de un grupo de profesionales que prestaban su servicio de forma abnegada y desinteresada.

De marcada vocación hacia su trabajo de médico y con una sensibilidad especial hacia aquellos que más sufren y necesitan, el aporte de Alfredo Arines trascendió los valores éticos y morales que sustentaban su profesión, aportó también “luces” en el seno de la corporación municipal, indicando aquello que revestía verdadera importancia para el desarrollo del Colón de entonces.

Enviá tu comentario