Por más que cabría decir que lo es, si se efectúa una comparación que muestre el contraste que la hace aparecer a aquella como tan solo insuficientemente desahogada, si se atiende a la que viven otros sectores productivos de la región, en especial la del sector turístico, que cabe considerar formando parte de una zona de desastre. Máxime teniendo en cuenta que la extensión de la actual cuarentena hasta el final de la Semana Santa, significa un golpe más, de especial contundencia para ella.
En tanto, y sin perjuicio de lo indicado, tiene un interés especial que corresponde sea destacado, en el marco de esa operación. Se trata de la forma en la que se disparó esa feliz iniciativa, por las reflexiones que esa circunstancia provoca. Es que, según ha trascendido, el proceso con ese final exitoso, comenzó con la idea que en ese sentido tuvo un vecino de Villa Elisa, y que acercó a la intendenta de esa ciudad. Quien la hizo suya, y encontró una encomiable recepción por parte de aquellos a los que impuso de esa necesidad. Frente a lo expresado, caben dos tipos de consideraciones. La primera tiene que ver con la manera harto sensata, además de desprendida, de la alcaldesa elisense, algo nada frecuente en este tipo de situaciones, en las cuales es común que cada cual piense en “su quintita”. Algo que no hizo, en el entendimiento que era el hospital colonense, el lugar más apropiado para la instalación que nos ocupa.
La otra, que al actuar de esa manera permitió “una concentración de los recursos” generosamente donados, ya que teniendo en cuenta que la gran mayoría de las empresas avícolas donantes, tienen sus plantas industriales fuera de los límites del municipio colonense, no resulta inverosímil el suponer que de no haberse producido esa coordinación de esfuerzos; las donaciones se hubieran igualmente efectuado, pero es dable conjeturar que esa dispersión en la aplicación de cada una de ellas, hubiera tenido resultados menos provechosos; independientemente de la manera eficaz en que fueran aplicados.
Bien se dice que “la unión hace la fuerza”. De allí la importancia que tendría el ver a “las municipalidades de la tierra de los palmares”, que pasaran de las palabras a los hechos. Es decir, que den una demostración concreta de su comprensión y consiguiente concreción del concepto de “sinergia”. La que, según el diccionario, no hace otra cosa que reflejar “el fenómeno por el cual, cuando actúan en conjunto varios factores, o varias influencias, se observa un efecto mayor, del que hubiera podido esperarse operando independientemente”. Siendo tantas las empresas que se podrían acometer de consuno.
