Cuestionó que no fue "notificado de la resolución que tomaron", que la prueba solicitada a la Universidad de Belgrano "la desvirtuaron completamente" y que los viáticos que se le endilgan "no pudieron demostrarlos".
Aseguró que no tiene nada de qué arrepentirse y por el contrario se manifestó "convencido" de ser "un ejemplo para la Justicia de Entre Ríos y del país", por lo cual adelantó que apelará lo dispuesto por Diputados. Reclamó: "Quiero ser respetado como juez, para poder actuar como juez dentro del esquema judicial de Entre Ríos". Acusó al ex gobernador y actual diputado, Sergio Urribarri, de encabezar una persecución en su contra y de llamar a los legisladores para que cambien sus votos: "A una diputada la habló Urribarri para decirle que le iba a quitar el nombramiento", apuntó.
Sostuvo que el proceso es "para satisfacer las precauciones que parece que ha tomado cierto sector del gobierno respecto de ciertas investigaciones y en eso no sirve un juez con mi trayectoria para que los juzgue, les sirve un juez que les de impunidad".
Dijo, con la voz quebrada, estar "muy solo" y afirmó: "Me sacan de una patada, porque molesto".