El historiador y docente Alejandro González Pavón, realizó una reconstrucción de la llegada de la imagen a la ciudad, la cual incluye varios datos curiosos que involucran no solo a la parroquia que la acogió, sino a un lugar tan emblemático como el cementerio y a la figura de Dolores Costa, viuda del General Justo José de Urquiza.
De aquella primera imagen en desuso a la capilla del cementerio
El relato realizado por el Prof. González Pavón es el siguiente:El 15 de septiembre de cada año, el calendario litúrgico conmemora el “Día de la Virgen de los Dolores”; y para los colonenses esta es una fecha muy especial ¿Por qué? Porque debemos recordar que nuestra ciudad, sobre todo la Parroquia de los Santos Justos Justo y Pastor, cuenta con una Vice Patrona la cual es Nuestra Señora de los Dolores. Es una de las pocas parroquias en la provincia que cuenta con una Vice Patrona. Por un lado, es necesario que recordemos algunos aspectos históricos que responden en forma directa al porqué de la elección de esta advocación de la Virgen: cabe considerar que la elección y/o imposición del nombre de los Santos Patronos de Colón, responden en forma directa a uno de los nombres del fundador de esta ciudad, el Gral. Justo José de Urquiza, el cual, una vez conseguida la autorización para edificar y posteriormente bendecir una Capilla en su propia residencia familiar, recibe como regalo un relicario que contiene restos de los niños mártires Justo y Pastor. Además de este dato, debemos mencionar otro que es tan importante como el primero: la designación del nombre de la Vice Patrona (Nuestra Señora de los Dolores), responde directamente en honor a la esposa del Gral. Urquiza, Doña Dolores Costa.
Pasado algunos años de haberse elevado a Parroquia, Doña Dolores Costa dona a la Iglesia de los Santos Justo y Pastor una imagen de Nuestra Señora de los Dolores, considerando la importancia que tenía ésta para la comunidad. Dicha imagen era de estilo maniquí vestido con ropaje real, con un manto bordado en hilos de oro y con una corona de 7 estrellas (7 dolores) que coronaban su cabeza. Esta imagen con el paso del tiempo se fue deteriorando y con la reforma del interior del tiempo que se realizó en la década 1970, quedó en desuso. Hoy no se tienen datos de su paradero. La imagen de la Virgen de los Dolores que expone el templo parroquial en la actualidad corresponde al juego de imágenes representativas del Calvario, traídas desde Francia por el Pbro. Narciso Goiburu a fines de la década de 1920, principios de la década de 1930 (un total de tres pieza)
La Capilla del Cementerio está dedicada a la advocación de Nuestra Señora de los Dolores; y la elección de este nombre responde a dos cuestiones bien claras y definidas: por un lado porque el Cementerio actual (habilitado el 2 de enero de 1891) fue una donación (el terreno) de la viuda del Gral. Urquiza, Doña Dolores Costa y por otro, la advocación de la Virgen de los Dolores es una de las advocaciones más comunes y frecuentes en este espacio. El interior de la Capilla cuenta con un altar realizado en ladrillo, revocado y cubierta la parte superior con un mármol, hasta hace no muchos años se podía visualizar el vitraux que representaba a la Virgen de los Dolores el cual hoy, debido a las reiteradas roturas que sufría por consecuencias de piedras y demás, se encuentra cubierto por una madera que lo recubre.
Allí se suelen realizar los oficios religiosos (habilitada para todas las religiones) y las misas de cada 2 de noviembre por el Día de los Difuntos.
