“Desde el establecimiento sanitario se recordó, asimismo, que toda información referida al estado de salud de pacientes (más aún al tratarse de niños, niñas y adolescentes) es confidencial. Por lo tanto, como efector sanitario, es parte de su tarea institucional resguardar esos derechos tal como establecen las leyes en ese sentido”, concluyeron.
“Desde el establecimiento sanitario se recordó, asimismo, que toda información referida al estado de salud de pacientes (más aún al tratarse de niños, niñas y adolescentes) es confidencial. Por lo tanto, como efector sanitario, es parte de su tarea institucional resguardar esos derechos tal como establecen las leyes en ese sentido”, concluyeron.