Estudiantes y docentes ya no pueden habitar el lugar y entonces se ha convertido en una escuela nómade: cada día, recorren la localidad para ir de un lugar prestado a otro para poder dar clases. Se trata de una Escuela Nina, por lo cual los alumnos de primaria están desde la mañana hasta la media tarde.
La primera estación ocurre en el Instituto Comercial “José Manuel Estrada”. Después, los chicos regresan, caminando, a las instalaciones de la escuela, donde funciona el comedor. Almuerzan, se alistan y vuelven a salir, pero entonces el destino es otro. Como no hay lugar en el Instituto Comercial, el resto de la jornada escolar la completa en la Escuela Nº 9 “René Favaloro”.
Victoria Amarillo, mamá de dos alumnos, detalla que en 2017 empezaron con las gestiones ante Provincia para conseguir arreglos en el edificio. “En ese momento, había un presupuesto, pero no se concretó la obra. Y en el transcurso de estos años, la escuela se fue cada vez derrumbando más. Y en diciembre del año pasado ocurrió una gran caída de techo en la zona interna de la escuela y en los pasillos”, dio a conocer.
El martes de esta semana, en una jornada de precipitaciones, los chicos salieron a hacer su itinerario habitual: de una escuela a la otra para dar clases caminando, bajo la lluvia. Los tutores decidieron filmar la escena y viralizarla en las redes. De ese modo, buscaron llamar la atención.
“Esto es de todos los días. Los chicos empezaron las clases este año en otro lugar, en el Comercial, que prestó aulas, pero solamente por la mañana. En el transcurso de la tarde los chicos ya no pueden estar ahí porque es una escuela secundaria a la cual recurren chicos de tarde. Entonces, los chicos salen del Comercial a las 11,30 de la mañana, van al comedor de la Escuela ‘Provincia de Corrientes’, que es prácticamente lo único del edificio que está en condiciones. Y cuando terminan de comer, salen caminando y se van a otra escuela, la Nº 9, otra escuela prestada, para finalizar la jornada escolar ahí. O sea, empiezan su jornada en el Comercial, vuelven a la escuela, al comedor y continúan en una segunda escuela que les prestan”, relató.