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Este miércoles en horas del mediodía, una avioneta se vio forzada a realizar un aterrizaje de emergencia en el aeródromo de la localidad de Monte Caseros, en la provincia de Corrientes. La pericia del piloto evitó una tragedia, y sus dos ocupantes, un hombre y una mujer, resultaron ilesos en el incidente.

La aeronave cubría la ruta desde Gualeguay, Entre Ríos, hacia Eldorado, en la provincia de Misiones. Según las primeras versiones, una alerta técnica interna o la falta de combustible obligaron al piloto a buscar la pista más cercana para un descenso preventivo. La elegida fue la de Monte Caseros, aunque debido a la premura de la situación, el aterrizaje se efectuó en la antigua pista del aeroclub y no en la nueva.

Por el hecho, se activó un protocolo de seguridad de las fuerzas locales, al lugar acudieron unidades de la Policía de Corrientes, Bomberos Voluntarios de Monte Caseros, personal de Navegación Aérea Civil (NAC) y una ambulancia del hospital Samuel W. Robinson.

La bombero Maitena Carlino, quien estuvo a cargo del procedimiento relató que “nos informaron a la guardia que había aterrizado un avión, que en realidad se había caído una avioneta en el predio del aeroclub. Entonces nos dirigimos hacia el lugar con el Halcón 2, que es la unidad de ataque rápido, y también con la unidad de rescate. Íbamos ocho personas en total”.

Ante la incertidumbre del panorama, los equipos fueron preparados tanto para combate de incendios como para rescate de personas atrapadas.
“La unidad de ataque rápido llevaba agua, en caso de que el avión estuviera en llamas. La de rescate por si había gente atrapada. Pero cuando llegamos, los ocupantes —un masculino y una femenina— ya estaban fuera de la avioneta, bien, conscientes, y manifestaron no tener lesiones”, dijo.

Sobre lo que pudo haber motivado el descenso de emergencia, Carlino explicó que “ellos nos dijeron que el avión les mandó una alerta que indicaba que debían aterrizar de inmediato. La pista más cercana era la de Monte Caseros, aunque no pudieron ver la pista nueva y aterrizaron en la vieja”.

Por prevención, los tripulantes de la aeronave desconectaron todas las conexiones de combustible para evitar riesgos de incendio o explosión.
Afortunadamente, no se produjeron daños personales, aunque sí algunos daños materiales en la aeronave.

“Fue solo un gran susto. Fue una desgracia con suerte. La ambulancia llegó, conversó con ellos, pero no fue necesario el traslado al hospital. Ellos estaban bien y no quisieron ser revisados porque aseguraron no haberse golpeado”, agregó la mujer.

Ahora, los ocupantes están a la espera del visto bueno de la ANAC para poder trasladar la avioneta. Mientras tanto, el episodio deja una importante lección sobre los protocolos de seguridad y la rápida respuesta de los servicios de emergencia ante este tipo de situaciones poco habituales en la ciudad.
Fuente: Monte Caseros Online - El Libertador

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