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-¿Quiere comenzar contando algo sobre usted para quienes no lo conocen?

En política soy nuevo, el 95% de la gente que me acompaña nunca ocupó cargos electivos. Nunca habíamos participado en una campaña proselitista con vistas a una elección. Soy empleado municipal de planta hace aproximadamente 15 años, pero mi vida pasa desde hace 20 años por la docencia. Soy docente de las áreas sociales. En 1988 me ordené como sacerdote y estuve en el ‘89 y ‘90 en una parroquia que está en la entrada de Concordia, donde había dos zonas bien delimitadas cortadas por la vía. De este lado de la vía era una cosa y del otro era muy distinto. A mí siempre me tiró el otro lado de la vía, entonces agarraba mi bicicleta y me iba. Al mes que estaba ahí me llamaron y me dijeron que me tenía que quedar en mi zona, que no tenía que ir para allá. En un momento dije lo que pasaba y me fui, porque no estaba siendo verdadero conmigo y le estaba vendiendo a la gente algo de lo que no estaba convencido.

-¿Cómo se decidió a incursionar en política?

Es algo que siempre me atrajo como actividad social. He participado en algún partido sin ser candidato. Ocupé un puesto político pero en forma pasajera y por circunstancias especiales, fui secretario del concejo deliberante de San José por casi seis años. Nos decidimos con un grupo de amigos hace un año y medio. Empezamos a hablar y entusiasmar gente hasta que tomó más forma y ahora estamos embarcados en esto y muy contentos.

-¿Y por qué con el Frente Renovador?

Todos veníamos de una línea peronista. Viendo experiencias anteriores donde había cierta influencia externa en las internas que eran de un partido particular, la idea era que si no había una reforma de la Ley Castrillón, al menos yo y otro más no encontrábamos otro espacio, no teníamos garantía de participar con reglas claras de juego. El año pasado el propio Ministro Lauritto, un hombre del riñón urribarrista, planteó que quería reglas claras, y estas aparecieron recién un mes atrás. Nosotros conocíamos personalmente a Adrián Fuertes, el intendente de Villaguay, un hombre de amplia trayectoria y un trabajo impresionante en su municipio, hablamos con él, también con algún otro sector, y decidimos que nuestro lugar era acá, por una cuestión territorial también. A quienes estamos trabajando en esto nos interesa San José, estamos en el Frente Renovador con Adrián Fuertes en la gobernación y Sergio Massa en la nación, pero nos interesa nuestro territorio, nuestra ciudad. Yo tengo 53 años, estuve mucho tiempo afuera, pero hace más de 25 años que volví. Veo y conozco la realidad, y creo que hay cosas que transformar urgente, hacerlas de otra manera.

-¿Cómo qué?

Básicamente, estamos convencidos de la participación del Estado en la vida de las personas. Nunca creí en que otros estamentos puedan solucionarle la vida a la gente, si no que es el Estado del cual nosotros somos parte. Cuando hablamos del Estado, son todos los elementos que lo integran. El gobierno, porque es quien la gente elige para que conduzca, pero también queremos que la gente se involucre. Uno habla con la gente en San José y de lo primero que te hablan es de la salud, de lo mal que está el hospital. No podemos seguir mirando para otro lado diciendo “es una cuestión de la provincia”, hay que meterse. Yo sé que tiene sus trabas legales pero me refiero a que tiene que haber voluntad definida de querer solucionar las cosas. Es decir, para qué queremos participar en política, porque estamos convencidos de que es la única manera de solucionar las cosas, y queremos hacerlo de una forma transparente. Viste que te dicen que no solo tenés que ser bueno, sino parecerlo, pero en política yo digo que es al revés, no basta con parecer honesto, tenés que serlo verdaderamente. Cómo puede ser que en San José, llevamos una gestión de gobierno que va a cumplir ocho años y no han movido un dedo para poner un metro de gas natural ¿Cómo el Estado no va a pelear por eso si es por su gente? Ahora si entramos a defender otros intereses… Cada uno sabe lo que hace, ni hablar de los intereses personales. A esta altura de mi vida quiero comprometerme socialmente; el poder lo quiero para hacer algo para afuera, no para mí.

-Volviendo a lo que decíamos de que hay que ser honesto además de parecerlo, y desear lo mejor para San José, también hay que tener un plan concreto y saber cómo lo vamos a llevar a cabo en caso de que nos toque ser gobierno. Por ejemplo en el caso concreto del hospital, ¿cuál es el proyecto y cómo lo piensan realizar?

Hay dos cosas fundamentales. Lo primero que tiene que hacer un gobernante es gestionar, meterse y estar encima de las cosas ¿Qué significa gestionar en serio? Por ejemplo en el equipo de trabajo nuestro hay una obstetra, nos contó que con una colega viajaron tres o cuatro veces a Paraná, les pregunté si alguien las acompañó y me dijo que fueron solas. Gestionar no es solo tener iniciativas, sino acompañarlas con el peso del poder que nos dio la misma gente. En segundo lugar, la Municipalidad de San José tiene para este año un presupuesto de casi 110 millones de pesos. No podemos pensar que el municipio no puede destinar algo, el 1 o 2 por ciento para satisfacer las necesidades del hospital. Porque el hospital es provincial, pero la gente que se atiende es de San José, de mi pueblo. Es gente que no tiene la posibilidad que tengo yo u otros de ir a un lugar y pagar una orden. El hospital les debe satisfacer esa necesidad. El proyecto es ese: estar encima del hospital, mejorarlo. Devolverle lo que tuvo hace 30 años, cuando se hacían cirugías, partos. Hoy hay tres obstetras, suben a una ambulancia a llevar una parturienta y no sabemos dónde vamos a llegar, si a Colón, Gualeguaychú; un día terminaron en Paraná. Esas cosas no pueden pasar. Hay que golpear puertas, molestar.

-¿A qué cosas de las llevadas a cabo por Pablo Canali piensa darle continuidad?

El turismo es fundamental. Hay que mejorar un montón de cosas, pero creo que es una política de Estado, todo sabemos lo que significa como industria. Ahora hay que crear conciencia de lo que significa que la gente venga a traernos dinero fresco, porque eso es el turismo. Si decimos que queremos ser una ciudad turística, pinchamos una goma un sábado a la noche y no tenemos una gomería abierta. El Estado y los privados tienen que trabajar en forma mixta para seguir creciendo en ese aspecto. No es solo hacer un bungalow para que la gente tenga donde quedarse; hay que brindarle servicios. Creo que no terminamos de caer en la cuenta de la riqueza turística que tenemos en esta zona. No tenemos techo. Vivimos en un lugar privilegiado. La obra pública no te puedo decir porque si hay algo que este gobierno ha reconocido públicamente es el déficit que ha tenido en este tema. El arreglo y mantenimiento de calles es básico; no podemos estar pensando en el año 2015 si hay que poner broza o ripio en las calles. Vas a cualquier ciudad de Entre Ríos con muchos menos habitantes y tiene todas sus calles asfaltadas. Es una cuestión de mentalidad. Se han puesto muchos cordón cuneta; hay que seguir haciéndolo. Se han hecho muchas obras de cloacas, hay que profundizarlas. En El Brillante se ha hecho una obra de cloacas y hay mucha gente que no se ha conectado. Podemos discutir dos días si deben pagar o no, si es asistencialismo, si es clientelismo, pero me parece que si le conectás la cloaca a la gente estas solucionando un montón de problemas y previniendo enfermedades.

-Otro tema que depende del Estado Provincial pero preocupa y cada vez más, es el de la seguridad ¿Un intendente puede hacer algo por el tema?

Yo creo que sí. Tenemos que trabajar en medidas concretas. Más cámaras de seguridad, ampliar el centro de monitoreo. En otros lugares ha dado resultado, y nosotros, por más que nos resistamos, nos va invadiendo la ola de inseguridad por un montón de circunstancia. Hay que crear un espacio compartido entre la municipalidad, la policía, y personas que se quieran involucrar, para tener una guardia permanente, que en este momento lo hace Inspección, pero hay que ampliarlo.

-Está el foro de seguridad como espacio de discusión…

Me parece bien como espacio de discusión, pero la seguridad no la resolvés discutiendo en una habitación de 6X6 cincuenta personas. Desde febrero que estamos caminando y hablando con la gente, y hay quienes me dijeron que fueron al foro porque les pasó algo y no pudieron decir nada o los hicieron callar. Podemos hablar cinco días, pero la política es hacer; hay que tomar medidas y decidir cosas. Es más todavía: gobernar es prever. El que prevé gobierna y el que gobierna prevé. La prevención es esencial y se hace con hechos concretos. Pongamos más cámaras de seguridad, invirtamos.

-¿Quiénes lo acompañan?

Todavía estamos ajustando algunos detalles con la viceintendencia, que en su momento daremos a conocer el nombre. La mayoría de quienes nos acompañan es gente joven; creo que yo soy el que peina más canas. Como concejales me acompañan Daniel Creppy, bibliotecario; una joven contadora que es Soledad Bouvier; Mauricio Vittorio; Edith Medina, que es obstetra. Hay gente de barrio El Brillante también.

-¿Qué novedades tiene de la candidatura de Sergio Massa?

Ha dicho que no se quiere bajar y ha dicho algo interesante: “si tengo pocos votos por qué se preocupan”. Es obvio que acá hay toda una estrategia oficial de querer vaciar una estructura, pero Sergio Massa dice que sigue. Ni hablar Adrián Fuertes.

-Igual desde el Frente Renovador insisten bastante en un acuerdo con el PRO.

El problema es que el PRO no deja entrar al Frente. Iba a haber una reunión el miércoles para sindicar el tema de la gran alianza, y el comité provincial de la UCR pidió una prórroga hasta el lunes porque le pidió al comité nacional que hable con Macri para que autorice a pegar con Massa y el Gen de Margarita Stolbizer. Si Massa no mide tanto, ¿por qué tanto temor de dejarlo entrar?

-Se decía que iba a ser candidato a gobernador de la provincia de Buenos Aires, donde la candidata de Macri no mediría tanto. (Al momento de la entrevista no conocíamos la declinación de la candidatura de De Narváez).

La política es el arte de lo posible. Vamos a esperar hasta el lunes a ver qué deciden.
Fuente: El Entre Ríos (edición impresa)

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