Con solo 16 años, Tubaro comenzó a armar impresoras 3D. Este exitoso emprendimiento lo llevó a fundar Atomic Lab, marca que crea, imprime y entrega de forma gratuita, manos y brazos impresos en 3D a quienes lo necesiten, entre ellos muchos niños. Su reconocimiento a nivel mundial lo hizo acreedor de varios premios, incluidos dos de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI/OMPI) de la ONU. En 2015, el presidente de EE. UU. Barack Obama destacó al joven argentino durante su encuentro con jóvenes emprendedores de nuestro país.
“No se pierdan la oportunidad de escuchar este caso de un joven y exitoso emprendedor argentino que trasciende en el mundo e inspira a tomar su ejemplo”, dijo por redes sociales el intendente de Colón, José Luis Walser.