Hasta el momento, “nunca se recibió un informe dudoso o negativo que puedan confirmar los rumores que, aún hoy, siguen circulando”, destaca Ingold al poner de relieve que quien ocupa el cargo de “administradora” del hospital es otra persona, Claudia Lugrin, designada en ese puesto en el año 2007 previo a su asunción como directora.
“Estoy dispuesta a recibir cualquier dato o elemento concreto que permita esclarecer cualquier situación irregular que dañe nuestro hospital e invito a quienes dicen tenerlo a hacérmelos llegar para obrar en consecuencia” insta, en otro tramo de su escrito, ante las irregularidades sugeridas.
En esa línea, respecto a quienes firmaron la nota original en representación de la cooperadora, la médica pediatra entiende que “debe ser difícil trabajar colaborando para una institución y descreer o tener tantas dudas de la misma”, al traer a colación una serie de obras conjuntas. “Aunque están en su derecho de reclamar los cambios que crean convenientes, no les asiste el derecho de dudar de la honorabilidad de las personas sin fundamentos”, deja planteado.
En relación a la posición personal de Ingold, “lo sucedido me libera de seguir manteniendo en silencio una decisión tomada a principios de este año: en enero de 2020, por situaciones personales, familiares y de salud, le presenté la renuncia al cargo de dirección a la ministra de Salud” revela, sobre el final de la misiva, acerca de su inminente discontinuidad.
Textualmente, la carta completa
Villa Elisa, 25 de Julio de 2020Comunicado Dirección Hospital San Roque
En principio quiero agradecer profundamente las innumerables palabras de afecto, solidaridad y cariño que recibí en estos últimos días, luego de los hechos de público conocimiento. Gestos que me ayudaron y que agradeceré siempre. Como la nota firmada por integrantes de la Cooperadora del Hospital deja entrever situaciones graves, considero necesario decir lo siguiente:
1- Acepté la dirección de nuestro hospital San Roque M.A de Francou en el año 2015 dispuesta a dar lo mejor y tratar de cumplir con mis expectativas y proyectos de lo que interpreto es la Salud Pública. Algunos se cumplieron, otros vendrán y algunos los intenté pero no se lograron, como sucede en todos los ámbitos de la vida. Tuve aciertos y errores de los cuales aprendí. Tengo claro que siempre intenté poner lo mejor de mí para lograrlo, pero no siempre alcanza con eso. Aún antes de mi asunción, siempre existió una acusación velada sobre la administración del Hospital.
2- Por ese motivo, lo primero que intenté fue ocuparme del tema de la administración que es auditada anualmente por dos contadores del Tribunal de Cuentas de la Provincia de Entre Ríos, quienes minuciosamente analizan una vez por año los libros en donde se detallan ingresos y egresos. Hasta el momento nunca se recibió un informe dudoso o negativo que pueda confirmar los rumores que, aún hoy, siguen circulando.
3- En cuanto a la administración, informo que la actual administradora del Hospital Claudia Lugrin ingresó a trabajar al Hospital en el área administrativa en el año 1992 y está designada como Administradora por resolución de la Secretaría de Salud desde el año 2007, a solicitud del entonces Director del Hospital San Roque.
4- En relación a la Cooperadora, quiero decir que durante todo este tiempo fui escuchada y acompañada por la institución, llegando a concretar el sueño del vacunatorio, la posibilidad de tener en el hospital diferentes prestaciones como psiquiatría, reforzar el servicio nocturno de enfermería, mejorar la sala de espera y sanitarios, acondicionar la sala de emergencias, entre tantas otras cosas. Como reflexión personal, opino que debe ser difícil trabajar colaborando para una institución y descreer o tener tantas dudas de la misma, por lo que lamento que la posición de algunos integrantes de la Cooperadora opaquen los logros obtenidos trabajando de manera conjunta. Aunque están en su derecho de reclamar los cambios que crean convenientes, no les asiste el derecho de dudar de la honorabilidad de las personas sin fundamentos. Y reitero lo que sostuve antes: estoy dispuesta a recibir cualquier dato o elemento concreto que permita esclarecer cualquier situación irregular que dañe nuestro Hospital e invito a quienes dicen tenerlo a hacérmelos llegar para obrar en consecuencia.
5- En cuanto a mi situación personal, lo sucedido me libera de seguir manteniendo en silencio una decisión tomada a principios de este año. En enero del 2020, por situaciones personales, familiares y de salud, le presenté la renuncia al cargo de dirección a la Ministra de Salud Lic. Sonia Velázquez. Por supuesto que la aparición de la pandemia COVID-19 postergó esa decisión y seguí al frente como en el primer día, con la ayuda de TODO el personal del hospital y de la comunidad elisense. Para enfrentar la misma, se recibió la ayuda de diferentes personas y entidades, teniendo en la actualidad un establecimiento preparado para dar respuesta, dentro del nivel de complejidad de nuestro hospital (1B) y acorde a lo pautado por Salud Pública. Y seguiré en mi cargo hasta que las autoridades provinciales definan el recambio solicitado. Ese mismo día, me pondré a disposición del nuevo Director o Directora para seguir colaborando como lo hice desde el primer día que ingresé al Hospital.
6- Termino esta carta agradeciendo nuevamente el apoyo incondicional de mis compañeros de trabajo y de cientos de personas de esta comunidad, en este momento en que nos tenemos que mantener unidos y trabajar responsablemente como comunidad para sobrellevar de la mejor manera posible esta nueva realidad a la que nos enfrenta el COVID-19. Por ese motivo les informo a los medios de prensa que ésta será la única vez que me refiera públicamente a este tema.
Graciela M. Ingold
Directora del Hospital San Roque
Sobre Ingold
Médica pediatra de reconocida trayectoria, asumió la dirección del hospital de Villa Elisa en marzo de 2015, reemplazando al odontólogo Leonardo Barchi que había renunciado alegando “cansancio personal”.Graduada de pediatra en la Universidad Nacional de Córdoba en la promoción 1984, a lo largo de su trayectoria también se desempeñó en los hospitales Gutiérrez y Garrahan de Capital Federal.
Hija del fallecido doctor Luis Cesar Ingold, un activo ciudadano que cooperó en distintas entidades de bien público como el propio nosocomio local y la Escuela Normal Superior, que actualmente lleva su nombre.
