Atención

Esta imágen puede herir
su sensibilidad

Ver foto

Compartir imagen

Agrandar imagen
Estando internado en Concepción del Uruguay, este jueves falleció Raúl José Grantón (75), uno de los seis condenados por el crimen del ingeniero químico y productor ganadero Pascual Viollaz, ocurrido en la ciudad de Villa Elisa el 25 de mayo de 2020.

Tras ser sindicado como ideólogo del ataque y “datero”, fue encontrado culpable como coautor penalmente responsable del delito “Homicidio en ocasión de robo”, por el cual recibió una pena de 16 años de prisión efectiva en diciembre de 2021. Con libertad condicional durante un tramo del proceso, en su momento “Chinito” fue noticia por solicitar que se le permitiera salir a bailar los días viernes y sábados desde la hora 20 y hasta las 7 de la mañana del día siguiente, lo cual fue rechazado de plano.

La investigación penal preparatoria y acusación estuvieron a cargo del fiscal Alejandro Perroud, quien llevó a los responsables al banquillo de los acusados en un juicio por jurados que hizo historia al convertirse en el primero del Departamento Colón. La vivienda de Grantón, que fuera allanada por este caso, estaba situada en colonia El Pantanoso, en las afueras de la “ciudad jardín”. De hecho, fue el único de los involucrados en el hecho que estaba domiciliado en la misma localidad que la víctima.

Sus restos fueron trasladados desde “La histórica” hacia su lugar de origen, donde fueron velados brevemente y luego recibieron sepultura en el cementerio municipal, este viernes a las 10.
Sentencia firme
A principio de agosto, la Sala Penal del Superior Tribunal de Justicia resolvió rechazar las impugnaciones extraordinarias de las defensas de Grantón y de cuatro de los condenados, contra la sentencia dictada por la Sala II de la Cámara de Casación de Concordia, que había confirmado el veredicto de los imputados por parte del jurado popular.

Por su parte, la defensa de Luis “El Sordo” Herrlein, el sexto condenado, no había interpuesto recurso.
“Nuestras historias quedarán”
Previo al crimen, Grantón solía movilizarse por Villa Elisa en un excéntrico triciclo motorizado de color amarillo.

En 2019, al exhibir una foto del rodado en su perfil de Facebook, un contacto suyo comentó: “Qué historia tiene ese triciclo, y el dueño no te cuento”.

Ante ello, respondió: “Nosotros vamos a morir, pero nuestras historias quedarán y, a través del tiempo, alguien las recordará”.
Fuente: El Entre Ríos

Enviá tu comentario