Rodrigo Escalada, de tan solo 7 años, asiste a ver todos los partidos de Ferro, y en esta oportunidad al finalizar el encuentro, vio a dos jugadores de La Armonía que estaban desconsolados por la derrota y eliminación del torneo, así que se les acercó para darles su cariño.
Según consta en imágenes, el niño se acercó y fue a consolar a los jugadores Diego Revello y Galo Impini. Luego los abrazó y esa foto quedó inmortalizada en la cámara del Horacio Bocha Roldán, que estaba atento a la situación.
El menor es jugador de las inferiores de Ferro y desde la institución felicitaron a sus padres Alonso e Isabella.