Se trata de una medida solidaria y no vinculante, expandida entre cuarteles vecinos, que busca proteger a personas con trastornos del espectro autista y condiciones similares que sufren su estridencia.
Entre las primeras instituciones bomberiles en anunciar su adhesión a esta iniciativa, aparecieron algunas del Departamento Colón: Colón ciudad, San José y Ubajay, aunque quedan otras que todavía no lo hicieron.
Igualmente, desde los mismos cuarteles informaron que las sirenas se seguirán escuchando, en estas y otras fechas, en casos de emergencia.