La carrera se desarrollaba con total normalidad hasta que, en un momento dado, una maniobra lo llevó a hacer un trompo, ser colisionado y luego volcar el auto.
Tras el accidente, fue trasladado a una clínica para ser sometido a estudios radiológicos y clínicos.
Recientemente reincorporado a las pistas, “Calo” corría en un Fiat Uno acondicionado para este campeonato, que sufrió importantes roturas a raíz de los impactos y quedó prácticamente destrozado.