Atención

Esta imágen puede herir
su sensibilidad

Ver foto

Compartir imagen

Agrandar imagen
Aeropuerto Internacional de Carrasco, Uruguay.
Aeropuerto Internacional de Carrasco, Uruguay.
Aeropuerto Internacional de Carrasco, Uruguay.
Tras la crisis de la conectividad aérea internacional que provocó la pandemia, Uruguay puso en marcha el camino de reconexión con el mundo y sigue sumando aerolíneas que confirman sus frecuencias con Montevideo. De este modo, el país vecino consolida su plan para mantener sus vínculos con el mundo en la post-pandemia.
Vuelos tras 15 meses
Una a una, las principales líneas aéreas de la región comenzaron a rearmar sus conexiones con Uruguay. A comienzos de julio, Latam retomó sus vuelos entre Lima y Montevideo después de 15 meses de suspensiones. Actualmente la compañía chilena vuela un avión semanal entre las dos capitales. Además mantiene rutas con San Pablo (Brasil) y Santiago (Chile) con tres y dos frecuencias semanales respectivamente.

Iberia es otra de las aerolíneas internacionales que decidió volver a volar hacia el Uruguay. La semana pasada informó que a partir del 1º de septiembre agregaría dos frecuencias a las tres ya existentes hasta llegar a cinco por semana. Desde la empresa aérea española detallaron que el interés en aumentar las rutas con Uruguay se debió a una política de flexibilidad por parte del país y a una campaña de precios atractivos en clase turista.

El ministro de Turismo de la República Oriental del Uruguay, Germán Cardoso, confirmó que el aeropuerto internacional de Carrasco, en Montevideo, ampliará a cinco las frecuencias con Madrid de la compañía Iberia a partir de septiembre, convirtiéndose en el país latinoamericano con mayor conectividad con Europa.
Lo que pasará desde el 1 de septiembre
La confianza que demuestra Iberia con el país vecino se explica por el anuncio que hiciera el presidente uruguayo días atrás. El 9 de agosto, Luis Lacalle Pou, anunció que el país permitiría el ingreso de los extranjeros que cuenten con propiedades en Uruguay y que sus familiares directos podrían ingresar al país en calidad de turistas a partir del 1 de septiembre, siempre que cuenten con el esquema de vacunación completo y un test PCR negativo, sin requisitos de cuarentena.

La aerolínea española además de retomar sus rutas con Uruguay, eligió al país oriental para estrenar el pasaporte digital de IATA. Se trata de un pasaporte sanitario que permite a los pasajeros almacenar, gestionar y verificar la documentación sanitaria.

Es una herramienta confeccionada por la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA, por sus siglas en inglés) para agilizar el control por parte de las aerolíneas y las autoridades migratorias y hacer más fluido el tránsito aeroportuario.
En noviembre, más habilitaciones
El presidente uruguayo detalló también que a partir del 1º de noviembre permitirán el ingreso de extranjeros sin distinción del país de origen. Por supuesto, con el esquema de vacunación completo. A esto se le suma la buena disposición del Gobierno uruguayo con sus visitantes. Su presidente declaró que evalúan la posibilidad de vacunar de forma gratuita a todos los adolescentes de 12 a 18 años que viajen con sus familias. Sin embargo aclaró que “es una decisión que aún no se ha tomado”.

En este contexto propicio para los turistas internacionales que deseen visitar el Uruguay y atractivo para las empresas aéreas que deseen aumentar sus conectividades, se suman dos aerolíneas que retomarán operaciones con el país: la aerolínea brasileña GOL y la colombiana Avianca.

La primera volverá a tener vuelos a Uruguay a partir del 3 de noviembre a través de la ruta que une al aeropuerto de Carrasco con el de Guarulhos, en San Pablo. Según informó el gobierno uruguayo a través de su Ministerio de Turismo, la compañía aérea brasileña mantendrá cuatro rutas semanales volando aviones Boeing 737 800 con capacidad para 176 pasajeros.

En cuanto a Avianca, la aerolínea colombiana retomará a partir del 1 de diciembre tres frecuencias semanales que unirán las ciudades de Medellín y Montevideo.
Fuente: Tomás Peiró para Infobae.

Enviá tu comentario