Vecinos informaron a El Entre Ríos que, a la par que se reiteraban las balaceras y los gritos, comenzaron a llegar patrulleros que, a toda velocidad y a contramano, se aproximaron a la cárcel, ubicada entre las calles Alem, Ituzaingó y Concejal Veiga.
Minutos después también irrumpieron en las inmediaciones de la prisión familiares de los reclusos, que insultaban a los uniformados. La policía cortó el tránsito impidiéndoles acercarse al muro perimetral del edificio.
También fue notorio el arribo de refuerzos del Servicio Penitenciario, que ingresaron corriendo a la Unidad Penal, mientras la Policía de Entre Ríos se ocupaba de mantener el orden en el exterior.
Aunque aún no hay información oficial, se especula que un grupo numeroso de internos habría intentado fugarse y fue repelido por el personal.
En un momento dado, alcanzó a verse humo que se elevaba desde el penal, sobre calle Concejal Veiga, aunque luego se disipó.
Pasadas las 14,30 arribó al lugar el Fiscal Ascué, en momentos en que resurgían los intercambios de disparos.
