La víctima ingresó a la guardia médica del Hospital Centenario con “traumatismo encéfalo craneal” producido por la caída en altura, una lesión considerada de carácter grave.
Algunos testigos indicaron que, tras caer de una altura similar a un segundo piso, la menor fue rescatada por su propio padre, quien en primera instancia la trasladó al sanatorio vecino para que la atendieran: presentaba algunos cortes por los cristales.
Horas después del accidente, trascendió que su cuadro clínico es estable y quedó internada en la Sala de Pediatría del Centenario, tras la realización de una tomografía axial computarizada.
