-Se lo pedimos a todos los candidatos: una presentación en primera persona ante los lectores.
-Mi nombre es Marcelo Monfort. Soy abogado de profesión. Tengo tres hijos. Fui concejal y luego dos veces intendente de Villa Elisa. Actualmente, soy diputado nacional. En esta instancia, la posibilidad de disputar el cargo de senador es una buena oportunidad para que, desde ese lugar y a través de un trabajo conjunto con los intendentes, presidentes de juntas de gobierno y referentes de instituciones, podamos trabajar juntos para potenciar la enorme oportunidad que tenemos en el departamento.
-¿No tuvo posibilidad de mantenerse en el Congreso con un cargo legislativo a nivel nacional?
-Sin dudas que el de diputado nacional es un cargo que tiene una enorme valoración. Es evidente que el estar alejado de la provincia y sus temas cotidianos hace que muchas veces uno tenga una determinada expectativa en función del cargo que a veces se termina colmando y otras no. Es un ámbito en el cual se abordan temas muchas veces alejados de la realidad cotidiana que vive la gente, leyes que hacen al país en su totalidad y que buscan acompañar decisiones que se pretenden desde el gobierno nacional.
Y lo cierto es que a mí me gusta más la cercanía, de poder estar en contacto directo con nuestra gente e instituciones, para ver de qué manera se puede colaborar desde la función. El hecho de haber sido intendente y haber tenido la posibilidad de que algunas cuestiones que se encuentran bajo la órbita de jurisdicción se puedan resolver de forma rápida y dar una respuesta directa, ofrece una dinámica de trabajo mucho más amplia y de mayor celeridad en la resolución de los temas que el Congreso, donde todo es inmediato.
El trabajo de senador departamental me volvería a los orígenes del trabajo que a mí más me gusta y entiendo estoy preparado para hacer. Hay cuestiones vinculadas a la salud, la educación, la seguridad, el desarrollo económico, el turismo y los caminos, que pueden mejorarse.
-Hablando de salud pública, recuerdo que habiendo sido intendente años atrás participó de varias reuniones y gestiones vinculadas al proyecto de un hospital regional, que finalmente nunca se concretó. ¿Qué propone ahora en este sentido?
-Ni bien asumí como diputado, gestioné varias audiencias ante el gobierno nacional para ver la posibilidad de conseguir fondos y construir un edificio. La primera respuesta fue que a ese pedido debe hacerlo el gobernador de la provincia o, en su defecto, el ministro de Salud. Ellos deben definir cuáles son los lugares donde se necesitan instalar hospitales con determinada complejidad. Y lo cierto es que este hospital regional para nuestro departamento nunca fue una prioridad del gobierno provincial, a pesar de los anuncios que pudo haber habido. En consecuencia, desde la Nación no bajarán ningún recurso económico.
Lo que debemos hacer mientras tanto es trabajar con los hospitales que tenemos, tratando de lograr mejoras edilicias como así también en los recursos económicos y humanos, para colmar y atender la necesidad de todo el departamento, en el que hay una importante ausencia del Estado en el funcionamiento de la salud pública.
El hospital de Colón no está a la altura de lo que necesitamos de una cabecera departamental y los de San José y Villa Elisa han dejado de tener muchas prestaciones. Ante cualquier evento que exceda lo mínimo, hay que derivar a Colón, Concepción del Uruguay o Concordia, con un protocolo de trabajo que no es bueno y se presenta insuficiente.
Y ni hablar del interior más profundo del departamento. En Ubajay, entre las 20 horas y las 6 de la mañana no tienen profesionales en el centro de salud, por ejemplo. Y en comunas y juntas de gobierno, es mucha más dificultosa la atención.
-Más allá del departamento, hay una realidad en los números que indican que Entre Ríos no crece, que el Estado provincial es sumamente pesado y que ese peso se traslada al sector productivo con impuestos. ¿Cómo se podría llegar a contrarrestar esta situación?
-El primer efecto positivo fue el cumplimiento del gobierno nacional en el otorgamiento a las provincias de la coparticipación que les corresponde, algo que en gestiones anteriores no pasaba. En gran parte, eso ha permitido que muchas provincias, como la nuestra, hayan logrado alcanzar el equilibrio fiscal que es oportuno para avanzar en algunas cuestiones, como por ejemplo disminuir la enorme carga de presión tributaria que existe sobre las personas, los bienes y las actividades.
Entre Ríos es la provincia con mayor carga tributaria en el país, por eso creemos que se puede hacer una disminución en ingresos brutos, impuestos inmobiliario y automotor que han tenido un enorme incremento en los últimos tiempos, sin desequilibrar los números de la provincia pero generando mayor competitividad de las empresas en el mercado.
-En un contexto de recesión económica, con muchas personas sin empleo, retenciones a las exportaciones y tarifas costosísimas, ¿cómo se podría trasladar al ámbito nacional esto que usted plantea?
-Sin dudas que nos encontramos en escenarios distintos. Hoy vemos gobiernos provinciales con equilibrio fiscal y una situación óptima para pensar en el desarrollo local.
Evidentemente, el gobierno nacional tiene esta óptica para ver de qué forma se puede mejorar la competitividad de nuestras empresas. Está claro que mientras no haya una posibilidad de ir equilibrando el costo que significa el funcionamiento del Estado, con los recursos que recibe el gobierno para atender esas circunstancias, será muy difícil.
Hoy la Nación destina más del 75 por ciento de su presupuesto a la seguridad social y, en base a eso, en adelante debe ver de qué manera puede aliviar la fuerte carga y presión tributaria, de tal manera que en un ámbito de equilibrio presupuestario se pueda encontrar en el sector privado el desarrollo que necesitamos.
-¿Cómo evalúa los resultados de Cambiemos a nivel departamental y provincial en las elecciones primarias, teniendo en cuenta que quedó posicionado en ambos casos en segundo lugar?
-A nivel departamental, está claro que no tenía internas que resolver. Fue una campaña en la cual recorrí gran parte del departamento, pero sabiendo que mi candidatura en cierto modo ya estaba garantizada.
Ahora la elección es mano a mano con el candidato del Frente para la Victoria. En este tiempo, hemos hecho un buen trabajo hablando con mucha gente y referentes de instituciones, así que estamos con mucho entusiasmo porque creo que vamos a ganar la elección en el departamento.
Justamente en el departamento, en relación al candidato que ganó en las elecciones primarias, con quien me tocó perder por 6 mil votos, hubo más de 12 mil personas que votaron en blanco. Entiendo que los buenos caudales de votos del vecinalismo, tanto en Colón como en San José, han significado que muchos vecinos no hayan optado por ningún candidato a nivel provincial. Por eso estamos trabajando fuertemente para que quienes no lo han hecho antes, elijan a uno de los candidatos a nivel departamental. En ese sentido, creo que en esta instancia recibiré su acompañamiento.
