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Los trabajadores de la educación universitaria nucleados en la Federación Nacional de Docentes, Investigadores y Creadores Universitarios Histórica (Conaduh) realizan paro este miércoles y proyectan más medidas para la semana que viene.

“Nos seguimos organizando y enfrentando la profundización de este ajuste feroz sobre nuestras vidas y la educación pública”, afirmó la secretaria general del Sindicato de Trabajadores de la Docencia Universitaria (Sitradu), Sofía Cáceres Sforza.

“Se desarrollan los paros nacionales que fueron votados en el Congreso de Conaduh, también, están aprobadas otras 48 horas para la semana que viene, que mañana se resolverán los días”, indicó la docente.

En ese sentido, apuntó que “estamos en un contexto que sabemos el ajuste que se vio en educación y nosotros venimos denunciando en las universidades; ya había una crisis presupuestaria que ahora se profundiza con los recortes en relación a los famosos presupuestos subejecutados pero, en realidad es un ajuste que tiene que ver con cumplir las metas que el gobierno y el Fondo Monetario Internacional acordaron que implica recortes en educación, salud, viviendas y todo aquello que beneficie y necesitan las mayorías sociales”.

El paro de Conaduh, “tiene que ver con una oferta que se realizó por debajo de la inflación. Teníamos un acuerdo que había llegado a un 41 por ciento en cuotas no acumulativas, es decir, mientras la inflación es acumulativa nosotros seguimos cobrando porcentajes de cuatro o cinco por ciento al sueldo de marzo de 2022 y, ahora, la propuesta del gobierno es sumar en tres cuotas (no acumulativas) un 21 por ciento, es decir, llegar al 62 por ciento pero a enero del 2023”, precisó la docente.

Detalló: “En enero de 2023 estaríamos cobrando un nueve por ciento al salario de marzo de 2022, un porcentaje que claramente no llega al 90 por ciento de inflación que se está estimando de parte de los organismos oficiales”.

Así, la propuesta del gobierno “es un ajuste salarial, no tiene nada de aumento ni de recomposición”, remarcó Cáceres Sforza, quien señaló que también la oferta tiene “sumas no remunerativas que son un retroceso a la universidad pública porque se había logrado que se blanqueen todos los códigos y, además, atentará contra las obras sociales y las jubilaciones”.

“Es todo un combo, que muestra a las claras que no hay ninguna intención de defender a la Universidad y educación pública, por eso resolvimos este plan de lucha que implicará acciones en las diferentes facultades”, subrayó Cáceres Sforza.
Fuente: AIM Digital

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