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La situación procesal del sindicalista Gustavo Aníbal Vallejos, acusado de haber abusado sexualmente a una nena de su entorno familiar, se agrava. El dirigente es oriundo de San José, departamento Colón, y recientemente fue citado a declarar como imputado por los delitos de abuso sexual gravemente ultrajante, con promoción de la corrupción de una menor, agravado por el carácter de ascendiente. Deberá presentarse en Tribunales a fin de mes. La víctima sería una niña de 11 años, que contó que sufrió los abusos entre los 5 y 9 años. La niña relató a fines del año pasado lo que vivió a través del dispositivo de Cámara Gesell.

Lo último que se supo es que días atrás el fiscal N°1 de Colón, Juan Sebastián Blanc, decidió modificar la apertura de causa y convocó a Vallejos a declaración de imputado por los delitos mencionados. El acusado deberá presentarse el 31 de marzo por la mañana.

También fue citado su hermano, Alexis Aníbal Vallejos, a quien se le endilga el delito de abuso sexual gravemente ultrajante con promoción de la corrupción de una menor de 13 años. Gustavo Vallejos es conocido en la localidad por ser árbitro de fútbol y dirigente sindical municipal de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE). Cabe señalar cuando salió a la luz la denuncia, el sindicato comunicó que lo apartaría de sus filas.

Los delitos que se le imputan están contemplados en el artículo 119 del Código Penal, párrafo segundo, cuarto inciso b), que prevé una pena que va de los 4 a 10 años de cárcel. Y el artículo 125, último párrafo (corrupción agravada), que prevé una pena de 6 a 15 años “cuando la víctima fuera menor de 13 años”. En la causa designó como abogado defensor a Jair Gay.

En la imputación la Fiscalía señala que presuntamente los hechos sucedieron “aproximadamente 10 veces” entre fines de 2015, cuando la nena tenía 5 años, hasta 2017.

En tanto, los presuntos abusos de Alexis Vallejos, hermano del sindicalista, fueron ubicados a mediados de 2016 y hasta 2019.

Finalmente, cabe señalar que los imputados tienen prohibido acercarse o realizar actos molestos -o por interpósita personas- respecto de la víctima y su familia.
Fuente: Entre Ríos Ahora

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