Mediante un juicio abreviado solicitado la semana pasada, se resolvería la situación procesal de Jorge Dussling (64), expareja de la víctima y único acusado del crimen, que desde su detención permanece alojado, con prisión preventiva que se fue renovando por distintos períodos, en la Unidad Penal Nº 4 de Concepción del Uruguay. Es que, en su momento, se había considerado que existía peligro de fuga y de entorpecimiento de la investigación, como así también riesgos procesales.
Admitiendo su autoría material y responsabilidad penal en el hecho, Dussling podría afrontar una pena de prisión perpetua, cuya homologación sería dada a conocer el próximo viernes, tras la conformidad acordada por el mismo y las partes involucradas de evitar un juicio oral y público por la contundencia de los elementos recabados durante la investigación.
La autopsia al cuerpo de la víctima había permitido constatar la existencia de hematomas en un brazo y la espalda, una lesión en la cabeza y signos de compresión manual en su cuello, siendo la causa probable de muerte asfixia por estrangulamiento manual. La causa se encuentra caratulada como “homicidio doblemente calificado por el vínculo y por violencia de género y tenencia de armas de uso civil sin la debida autorización legal en concurso real”, esto último referente a lo secuestrado durante una requisa: una carabina 22 y una escopeta calibre 28.
Representado legalmente por el defensor particular, Mariano Miño, la causa es llevada adelante el fiscal Nº 1 de Colón, Sebastián Blanc, junto a la fiscal auxiliar Nº 1, Micaela Di Pretoro.