Dos vestidos -uno de novia y otro de egresada- se convierten en piezas esenciales para comprender parte de la historia reciente. Estas prendas pertenecieron a las hermanas Cristina Lucía y Susana María Marroco Betendorff, jóvenes detenidas y desaparecidas durante la última dictadura cívico-militar (1976-1983).
Cristina fue secuestrada el 18 de abril de 1977 y Susana entre el 12 y el 16 de abril del mismo año. Su presencia en el museo trasciende lo personal: transforma cada objeto en patrimonio que interpela, educa y convoca a proteger la memoria colectiva.
La escena recreada en la sala replica un hogar de época, con sillones rojos, una lámpara tenue, un televisor antiguo y pertenencias personales que permiten situar al visitante en un ambiente íntimo y cotidiano. En este contexto, los vestidos adquieren una dimensión significativa: no son únicamente prendas, son fragmentos de una vida interrumpida.
La sala “Confidencial y secreto” posiciona estos objetos en diálogo con documentos, fotografías y artículos personales para contextualizar la experiencia de las hermanas Marroco Betendorf. El museo recupera sus identidades desde una perspectiva humana, sensible y profundamente respetuosa.
A través de esta puesta, se reafirma un rol como espacio de resguardo cultural e institución comprometida con la construcción de memoria. Cada pieza conservada y exhibida se integra así a un patrimonio que pertenece a toda la comunidad y que invita a reflexionar, recordar y resignificar la historia reciente.