Los llamados de este viernes se hicieron a las 3:40, 4:20 y 5:30. "Quien llamaba manifestaba lo mismo a las víctimas. Por suerte, más allá de la hora, las tres personas cortaron antes de caer en el ardid", dijo la jefa de la dependencia policial, Viviana Galarza.
"En dos instancias era una voz masculina, y en la tercera, una mujer que dijo que era la hija de la señora", puntualizó y agregó: "cuando acudimos, hay gente que ni siquiera nos quiere abrir la puerta, por el mismo miedo que les genera la situación".
Días pasados, una vocal del Superior Tribunal de Justicia recibió llamadas a su teléfono fijo, y al celular, que había cambiado hace pocos días. Con la jueza, el ardid fue indicar que "tenían a su hijo secuestrado" y detallar datos sensibles como conocer que no tenía más custodia policial en el frente de su casa". Todos estos datos dan indicios a los investigadores de un importante trabajo de inteligencia de los malvivientes.
"Por eso siempre recomendamos tener algún otro método de comunicación con sus familiares. Y antes que nada, intenten establecer una comunicación, o llamen al 911", finalizó Galarza.
