Señalaron que desde la última edición, el incremento es de “casi el 200% en los cánones de participación. A eso sumar los costos de producción, grandes aumentos de la materia prima, la movilidad, alojamiento y comida durante esos días, dejan a los artesanos en una situación crítica, en muchos casos para participar de estas ferias coordinadas por organismos municipales con el auspicio muchas veces de los gobiernos provinciales y nacional”.
En este sentido, solicitaron “contemplen la situación económica que atraviesa el sector artesanal argentino, que no se termina de recuperar de la pasada pandemia, en donde fue uno de los más golpeados de la sociedad”.
“Pedimos que el artesanado no sea la variable de ajuste para solventar los costos de las ferias nacionales, especialmente de la Fiesta Nacional de la Artesanía, que suponemos debe bregar por preservar el patrimonio vivo que son los artesanos de nuestro país, y defender sus intereses como lo fue a lo largo de varias décadas con la coordinación de Hugo Da Silva, tratando de facilitar la presencia de los artífices y verdaderos protagonistas de la fiesta”.
Según decía el escrito, el colectivo “recibe constantes consultas de artesanos preguntando quiénes integran el jurado de selección este año, ya que hubo rechazos sin devolución y muchos artesanos con Rueca de Plata no han recibido aún invitación, sabemos lo que conlleva organizar un evento de tal magnitud, por ello le hacemos llegar estas inquietudes”.
Finalmente, pidieron “la participación en esta edición de la Sra. Betina Di Pascua, quien junto a Hugo Da Silva llevaron adelante la coordinación y el contacto con los artesanos los últimos 20 años”.
Para la Unión de Artesanos, “sería muy triste ver a alguien que dio tanto a la fiesta y sobre todo a los artesanos que permanentemente le expresan su cariño y apoyo, terminar su carrera alejada del evento, con toda la experiencia acumulada que verdaderamente representan años de inversión desde la comuna en su capacitación específica”.
Un planteo “muy particular”
Este miércoles, mientras se aguardaba la llegada del gobernador al predio de Termas San José para dar inicio formal a la temporada turística, el presidente municipal de Colón habló de este tema con El Entre Ríos.“Venimos trabajando con un equipo interdisciplinario fantástico, tomando todos los reclamos de los artesanos y los pedidos”.
“Establecemos el canon en relación a las variaciones inflacionarias. La carpa que necesitamos para esta edición cuesta 20 millones de pesos, con refrigeración, piso y todas las comodidades que los artesanos no tienen en la mayoría de las otras fiestas; algunas incluso se hacen al aire libre. Tenemos scouts que cuidan los stands, seguridad en las carpas, bomberos, policías y todo esto tiene un costo, que por supuesto el canon no alcanza a cubrir el 10%”.
Puntualizando en el reclamo, dijo: “Algunos artesanos, no todos, plantean que el canon es caro y lo hacen de una manera muy particular”.
Según José Luis Walser, “hay otra cuestión de fondo que la venimos conversando con todos los artesanos locales. Nos vienen acompañando Dafne (Lagrange), Luis Morand, Gustavo Da Silva, Leo Besson, más todo el colectivo de artesanos de la ciudad”.
Respecto a la participación de Betina Di Pascua en los preparativos para la próxima edición de la fiesta, responde: “Es una empleada municipal que tuvo trabajo relacionado a Artesanía y lo sigue haciendo. Es un caso particular porque estuvo tres años en su casa por una cuestión de salud y ahora está volviendo. Detectamos algunas cuestiones que no son del todo regulares para con los artesanos y eso lo queremos corregir, porque queremos ser equitativos con todos”.
“Lo que tenemos como objetivo es cuidar la fiesta y hacerla crecer todos los años”.
“La Fiesta Nacional de la Artesanía va a tener una grilla fantástica que la vamos a presentar el fin de semana y la mejor propuesta artesanal de la Argentina”, concluyó.
