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Mientras sobrelleva el confinamiento junto a su familia en Paraná, Mariano Werner dialogó con Radio Continental y reveló: “Me dieron muchas ganas de dejar de correr después de lo que pasó en Viedma, todavía no digiero lo que pasó”, y amplió: “Son amarguras difíciles de explicar y sabiendo lo difícil que es ganar, sabía que habíamos perdido una gran chance. Son esos fines de semana en los que todo salió tan bien, que hubiera ganado hasta con tres ruedas. Quedó mal mi nombre, siendo ajeno a lo que pasó".

La explicación se orienta a lo sucedido en la primera fecha de la actual temporada del TC, la cual por el momento está suspendida. El piloto de 31 años ganó con amplitud la carrera, pero su Ford no pasó la revisión técnica por anomalías en el carburador y fue excluido. De ese modo, el primer puesto recayó en Facundo Ardusso (Torino).

En otro momento del diálogo, el paranaense rememoró aquel título de 2010 que definió con Agustín Canapino, en el que los dos necesitaban el triunfo para celebrar. "Me queda la tranquilidad de que, en cada carrera y en cada campeonato, corrí con lo que tenía. No me pesa no haber salido campeón hasta el momento, pero me gustaría lograrlo por la gente y por mí también".

Por último, Mariano se refirió sobre su ausencia en el Súper TC 2000 en esta temporada: "Armellini no tiene el apoyo que tienen otros equipos, y no tiene un piloto rentado como tienen otros equipos. Deportivamente no me servía tener una temporada como el año pasado".
Fuente: Radio Continental/Campeones

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