El punto de partida volvió a ser la Capilla San Francisco de Sales, desde donde salieron a las 20 las parroquias Natividad de Nuestra Señora de Villa Elisa y Nuestra Señora del Carmen de Colón, mientras que una hora más tarde hicieron lo propio San José y Santos Justo y Pastor de Colón.
Se trató de la 26° edición de esta multitudinaria expresión de fe, que comenzó como una muestra de agradecimiento de un alcohólico recuperado y su familia en 1991, que a través de los años se fortaleció en participación y organización.
La peregrinación es programada anualmente por las parroquias que integran la zona sur de la Diócesis de Concordia y cuenta además con la adhesión de decenas de personas que se incorporan a caminar independientemente desde las distintas colonias y localidades vecinas, sumando intenciones, promesas y agradecimientos por distintas causas particulares.
Al llegar a destino, estaba programado que sacerdotes de la zona celebren una misa para cada agrupación -se preveía que la primera arribe a las 7 y la segunda a las 8 de la mañana-, dando la bienvenida a los peregrinos.
En tanto, la fiesta patronal en honor a la Virgen de la Medalla Milagrosa se llevará adelante el último fin de semana de noviembre en la parroquia de Arroyo Barú, con el propósito que quienes caminaron durante toda la noche puedan celebrar su aventura en otra fecha.
