“Tenemos que pensar un poco más allá, recuperando el sentido religioso. El consumismo se devoró la navidad”, indicó el obispo.
“Es maravilloso el encuentro con la familia, recuperando algunas imágenes de la Navidad para que le demos el verdadero sentido. Nos quedamos en lo nostálgico de la navidad, sin poder ir al fondo de la cuestión”, aseguró.
Respecto al sufrimiento que les genera a muchas personas, las fiestas, el obispo remarcó que principalmente se da “en aquellos que han tenido una pérdida importante de un familiar o persona cercana, generando un gran dolor”.
“Este año hubo una disputa muy fuerte respecto a la discusión por la despenalización del aborto que quedó marcado en la sociedad”, aseguró.
“Uno pretende que se recupere el sentido religioso de la Navidad, porque será una buena señal como sociedad” cerró el obispo.
