Dirigentes y personal de la entidad paranaense trabajaron arduamente durante toda la jornada en pos de presentar el campo de juego en óptimas condiciones. Pero los continuos chaparrones imposibilitaron el normal funcionamiento del sistema de drenaje. A las 17 horas el referee entró al campo de juego y luego de tomarse un tiempo prudencial, comunicó la suspensión media hora más tarde.
En Paraná llovieron alrededor de 120 milímetros y el campo de juego del Rojinegro no drenó lo suficiente y por eso se decidió la suspensión.No solamente en el estadio Grella, sino también en inmediaciones y en diferentes puntos de Paraná hubo inconvenientes provocados por la gran cantidad de agua (se estiman 120 mm) caída en las últimas horas.
Lamentablemente el Patrón deberá volver a hacer de local fuera de su estadio como sucedió en la primera fecha cuando también en el terreno del Sabalero cayó 2-1 frente a Atlético Nacional de Medellín. Recordemos que por la tercera fecha, en el Grella, goleó 4-1 a Melgar de Perú, triunfo que le permitió abandonar el último puesto.