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UCA Entre Ríos, con sede en Paraná.
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UCA Entre Ríos, con sede en Paraná.
La Universidad Católica Argentina, constituida como Facultad "Teresa de Ávila", cumple en este 2020 diez años en Entre Ríos, en el marco de su amplia trayectoria a nivel nacional y "federal": uno de sus grandes propósitos como institución que, además de profesionales, busca “formar buenas personas y CEOs de un país”, más allá de preparar a sus futuros egresados para el mercado laboral.

En diálogo con El Entre Ríos, el rector de esa casa de altos estudios, a nivel nacional, Miguel Ángel Schiavone, destacó que “el desarrollo que estamos teniendo en Paraná y todo Entre Ríos es muy importante, por estos diez años que recién llevamos trabajando bajo esta modalidad. De hecho, eso quiere decir que ni siquiera hemos llegado aún a nuestra propia adolescencia”.

En cifras, “tenemos 12 carreras que estamos ofreciendo a la comunidad, 1600 alumnos, más de mil nuevos alumnos que ingresan por año a las distintas carreras y 300 docentes”, mencionó para poner en contexto el arraigo que la institución tiene en el territorio entrerriano, donde desembarcó más de 40 años atrás con las facultades de Derecho y Humanidades, hoy fusionadas en UCA Paraná.

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El médico Miguel Ángel Schiavone es el primer rector laico en la historia de la UCA. Agrandar imagen
El médico Miguel Ángel Schiavone es el primer rector laico en la historia de la UCA.
Carreras “vinculadas a la abogacía y al notariado, pero también otras relacionadas a las ciencias económicas: contador público y licenciado en administración. Más recursos humanos y marketing”, puso Schiavone como ejemplos. Y también de las ciencias sociales, “como la psicología o la psicopedagogía y, para el próximo año, tendremos la licenciatura en fonoaudiología en Entre Ríos para todo el área mesopotámico”, dio a conocer a modo de anticipo.

“Algunas barreras, que antes considerábamos físicas, hoy por hoy ya no existen a la hora de acceder a algo. No hay límites para la difusión del conocimiento y más hoy con la incorporación de la virtualidad, cuando un alumno puede ir algunos días a cursar y otros días hacerlo desde su casa, el 30 por ciento” contextualizó el rector, respecto a la modalidad que la universidad venía poniendo en práctica desde el año 2018.
Un paso adelante
“Terminamos el primer cuatrimestre del año 2020 con el mismo programa, mismas actividades y los exámenes que se desarrollarán a lo largo de julio. Y empezaremos el segundo cuatrimestre en agosto, que ya está planificado bajo la modalidad virtual, porque los alumnos no van a perder el año” manifestó, con seguridad, el rector Miguel Ángel Schiavone.

Ello, por cuanto “en la UCA nos veníamos preparando en esto desde hace dos años para un porcentaje de 20 ó 30 por ciento de clases virtuales, entonces eso nos permitió pasar 100 por ciento a la virtualidad cuando surgió esta situación”, haciendo alusión al aislamiento social, preventivo y obligatorio dispuesto ante la pandemia del Covid-19. Anteriormente, “habíamos capacitado a los docentes e incorporado equipamiento, pero sin dejar que la tecnología reemplace al hombre, sino que expanda sus capacidades”, recordó el entrevistado.

“No abandonamos las actividades de extensión, que son gratuitas y han despertado mucho interés; ni las acciones solidarias durante la pandemia, porque no es solamente educar sino generar compromiso social e investigar para crear nuevos conocimientos”, agregó como datos.

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Instalaciones de la UCA, vacías en tiempos de coronavirus. Agrandar imagen
Instalaciones de la UCA, vacías en tiempos de coronavirus.
Este es un “cuatrimestre ganado para nosotros”, definió el rector. Y, a continuación, argumentó su afirmación: “Nuestros alumnos no perdieron su regularidad y nuestros docentes se formaron aún más en la virtualidad, tanto para dar clases como para tomar exámenes, empezando a cuestionarse lo que venían haciendo y a pensar mucho más en pedagogía y didáctica al momento de abordar los temas”.

Una vez finalizado el aislamiento social, “seguramente llegaremos a un porcentaje equilibrado entre presencialidad y virtualidad, pero no debe ser ni lo uno ni lo otro: que la presencialidad sirva para esa interacción necesaria entre alumno y docente, porque la tecnología no genera valores como sí lo hace un maestro”, reveló Schiavone.

Tanto docentes como alumnos “dijeron estar muy conformes con el rumbo que ha tomado la UCA para solucionar esta situación de pandemia”, reprodujo y añadió: “Me sorprendió la forma y la rapidez en que se adaptaron a los nuevos cambios, sin presentar resistencia a las herramientas tecnológicas y, al hacerlo desde sus casas, valorando que el desplazarse genera un costo y un tiempo, que a su vez significa otro costo, con muchas dificultades para llegar a ciertos lugares”.
UCA "federal"
La Universidad Católica Argentina tiene su sede central en Puerto Madero y otras sedes en la ciudad santafesina de Rosario, Mendoza y Paraná, además de una escuela secundaria que iniciará el nivel primario a partir de 2021 (Buenos Aires) y otra de nivel inicial y primario (Mendoza) que comenzará el nivel secundario en el ciclo lectivo 2021.

“Lo interesante dentro de lo que estamos llevando adelante, es el proyecto de integración de las distintas sedes a través de la virtualidad. Es decir, si hay un personaje mundial que viene a Buenos Aires, desde otras sedes pueden estar siguiendo y hasta interactuar con esa persona”, explicó el rector Miguel Ángel Schiavone.

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Aulas tecnológicas, gran apuesta de la UCA. Agrandar imagen
Aulas tecnológicas, gran apuesta de la UCA.
También, se aspira a una modalidad de “usos únicos” en sus cuatro sedes y, con anterioridad a la cuarentena, ya habían implementado “aulas rombos o tecnológicas” para poner eso en práctica. “Si al experto en determinado tema que se esté abordando dentro de una carrera lo tenemos en una sede, para qué buscar otro experto que se le parezca en otro lugar, si en realidad podemos optimizar uno para todas las sedes del país”, planteó en ese sentido. “Imagino que a una clase la dé Buenos Aires y a la siguiente Paraná”, puso como ejemplo.

Otro servicio federal, de interés para sus alumnos. “Tenemos una biblioteca virtual, en la cual están conectadas las cuatro sedes, y cualquier alumno puede ver algún material de libros, revistas y diferentes publicaciones internacionales virtuales: además del docente, también le llevamos la biblioteca a su casa”, subrayó el rector.
Rankings educativos
El rector de la UCA, Miguel Ángel Schiavone, consideró que “las evaluaciones son siempre buenas, especialmente cuando quien evalúa lo hace desde afuera”, luego de conseguir una posición privilegiada en el QS University Ranking y mantener su posición como única universidad privada en el Ranking Scimago.

Uno de los parámetros con los que su casa de altos estudios fue evaluada “es la reputación de los empleadores a nuestros egresados. Indudablemente, este es un elemento que se mira para decir que la UCA tiene buenos egresados”, detalló. También la reputación académica, “o sea cómo los otros docentes ven a los docentes de la UCA”. Otro, “la relación cuantitativa docente-alumno: cuántos docentes en relación a la cantidad de alumnos”, desglosó.

Respecto al último parámetro aludido, “la docencia es una actividad personal, no masiva. Por ello debe haber oportunidad de conocer a un docente que te lleve de la mano y no que simplemente te haga leer un libro”, reflexionó el rector.

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Alumnos entrerrianos de la UCA en la sede de Paraná. Agrandar imagen
Alumnos entrerrianos de la UCA en la sede de Paraná.
“Hace falta un número adecuado en la cantidad", resaltó. "Evidentemente eso tiene un costo económico, pero en la UCA nunca privilegiamos lo económico frente a los valores y la transmisión de conocimientos: la UCA no es un shopping educativo, porque siempre privilegiamos la formación del alumno y eso se ve reflejado en la innumerable cantidad de becas que otorgamos a través de distintos programas y convenios”, acotó.

Entre otros conceptos, Schiavone vertió que “las buenas personas y los buenos alumnos son necesarios, porque forman parte del egresado que queremos insertar en la sociedad y transformarla, más allá de una cuestión laboral” y, bajo esa misma premisa, que la UCA "debe marcar el rumbo del destino de la Argentina, y más aún al ser católica, a través de los valores que están faltando en la sociedad”.
Fuente: El Entre Ríos

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