Las grandes obras de las instituciones son hijas de su tiempo y fruto del esfuerzo de la sociedad en la que emergen. En 1873, año en que se forma el primer gobierno municipal de Colón, ya están dadas las condiciones socio- políticas que permiten su existencia.
La historia de nuestro municipio forma parte de un proceso más amplio, aquél que se constituye en torno a la organización nacional y su etapa institucionalizadora, teniendo como eje dominante a la idea de orden y progreso.
Es en este contexto cuando se crean en Entre Ríos las corporaciones municipales.
La década que transcurre a partir de 1860 fue un período caracterizado por la consolidación y organización nacional, la conquista del orden y la institucionalización del Estado. Este lento proceso, se fue estructurando a través de las presidencias de Mitre, Sarmiento, Avellaneda y Roca.
En esta época existían cuestiones claves a resolver para los estadistas argentinos: el progreso económico, el fomento de la inmigración, el desarrollo de la educación pública y la ordenación legal del Estado. El orden era condición necesaria para el progreso. En este sentido, la creación de un marco institucional acorde con los nuevos tiempos resultaba vital para la construcción de una República moderna.
En el litoral entrerriano, a orillas del Río Uruguay, el General Justo José de Urquiza ya había colocado las bases del progreso económico y civilizatorio a partir de la fundación de la Colonia San José en 1857 y de Villa Colón en 1863.
Urquiza coincidía plenamente con aquel axioma de Alberdi: gobernar es poblar. Su pensamiento y accionar se asentaban en la convicción de que la colonización y fundación de centros poblacionales era el instrumento más importante para erradicar la improductividad de grandes extensiones territoriales y lograr una efectiva organización Nacional.
Antecedentes municipales
El 29 de agosto de 1871 se eligió como gobernador al Ministro Doctor Leónidas Echagüe. El nuevo dirigente da comienzo a la organización de las municipalidades de la provincia y junto a estas disposiciones nace el municipio de Colón.
En nuestra ciudad, previamente a la creación de esta corporación, la administración pública estaba a cargo de la formación de una Junta de Fomento, que comenzó a funcionar a partir de 1865. En 1869, siendo gobernador Justo José de Urquiza, se crea el Departamento Colón, razón por la cual Villa Colón se convertía en ciudad cabecera del mismo.
Importantes disposiciones como la Ley de Ejidos, que la Legislatura sancionó en 1871 determinaron los límites del Ejido de nuestra ciudad, contribuyendo a solucionar problemas jurisdiccionales que se venían dando a nivel municipal. Al año siguiente, en 1872, la legislatura sancionó la Ley Orgánica de Municipalidades promulgada por el gobernador Echagüe. Esta ley disponía entre otras cosas: la cantidad de miembros titulares, según se tratara de una ciudad o una villa; los períodos de duración de cada gobierno y la forma en que serían elegidos los miembros de la corporación: en una elección popular y directa por los vecinos de cada municipio.
De este modo la municipalidad de nuestra ciudad comenzó su organización. Los primeros tiempos fueron muy difíciles: una grave situación económica y financiera obstaculizó las obras fundamentales que debía llevar a cabo, sin embargo, con abnegado esfuerzo y trabajo se fue dotando a la ciudad de sus edificios más importantes y de las instituciones claves para el progreso de Colón y del resto de las Colonias. La historia de la corporación municipal colonense, no puede separarse del contexto nacional y provincial que marcaron el inicio de su existencia y su trayectoria, como tampoco puede omitir la historia particular de aquellos hombres, que, con gran espíritu cívico ocuparon la presidencia municipal desde 1873. He aquí sus historias.
I-ALEJO PEYRET
(Período 03-03-1873 hasta 17-01-1874)
Alejo Peyret nació en Francia en 1826, estudió derecho en París y sustentó desde joven ideales republicanos y democráticos. Adhirió activamente a la revolución de febrero de 1848, emigrando de su patria después de producirse el golpe de Estado de Luis Bonaparte que, aniquilando el parlamento, proclamó su propia dictadura.
En 1852 Alejo Peyret se encuentra ya en Montevideo, defendiendo la causa de la Confederación Argentina. Tres años después, en la otra orilla del río Uruguay, Alberto Larroque, director del Colegio Histórico de Concepción del Uruguay, le ofrece una cátedra en dicha institución. Desarrolló otras actividades como editor de un periódico y escribió artículos para diferentes publicaciones. El 11 de julio de 1857 fue designado administrador de la Colonia San José por el Presidente Justo José de Urquiza.
En 1863 ingresó a la Logia Jorge Washington de Concepción del Uruguay. En 1871, luego del asesinato de Urquiza y la revuelta de López Jordán, los hermanos masones reorganizan la Logia. En esta ocasión Alejo Peyret propuso que se creara una comisión encargada de constituir una entidad para fundar una biblioteca pública y una escuela gratuita, la entidad organizaría conferencias científicas con el propósito de difundir el gusto por las ciencias y las letras y mantener vivo el sentimiento por la Patria de los ciudadanos, debiendo prohibirse las discusiones políticas y religiosas en el seno de la futura entidad. Esta iniciativa fue aprobada y al mismo tiempo quedó constituida, bajo la presidencia de Peyret, otra comisión cuya labor dio lugar a la fundación de la Sociedad El Porvenir, el 22 de abril de 1872. Entre 1877 y 1878 la Logia elige como orador al profesor Alejo Peyret, quien propone constituir una comisión para estudiar la situación afligente de numerosos jóvenes estudiantes, que no pueden proseguir sus estudios en el Colegio por falta de recursos. La Logia acuerda destinar la totalidad del fondo de beneficencia para dicho fin, siendo este el inicio para la constitución de La Fraternidad, como sociedad de socorros a los estudiantes, magnífica institución anexa al Colegio Histórico. Entre otras obras importantes, en julio de 1882, en una asamblea de la Logia presidida por Alejo Peyret, quedó constituida la Sociedad Francesa de Socorros Mutuos.
Fue el primer presidente municipal de Colón, y aún, desde mucho antes intervino en este ámbito: fue miembro de la Comisión de Fomento de Colón desde marzo de 1865 y nombrado Vicepresidente de la Junta de Fomento el 12 de julio de 1868. El 2 de marzo de 1873 fue elegido miembro del Consejo Municipal por el voto popular y directo de los vecinos de Colón y designado Presidente Municipal por unanimidad para el período 3 de marzo de 1873 hasta el 17 de enero de 1874.
Fue un gran propulsor de la colonización, la agricultura y la educación, dedicando su vida y su tiempo a la gesta del progreso, tal esfuerzo repercutió benéficamente no solo en estas tierras, sino que su honrosa labor se extendió más allá de la provincia. En la Universidad de Buenos Aires ocupó la cátedra de francés, invitado por Juan María Gutierrez. Ya de regreso a Entre Ríos se desempeñó en el Colegio Histórico del Uruguay en la cátedra de Historia de las Instituciones Libres. En 1881 en misión encomendada por el gobierno de la Nación recorrió el territorio de Misiones. Fruto de su observación publicó las Cartas sobre Misiones, años después fue designado Inspector General de Tierras y Colonias, cargo que desempeñó hasta 1899 y nuevamente sus agudas observaciones, registradas en la correspondencia del diario Tribuna Nacional se plasmaron en el libro Una visita a las colonias argentinas.
Inestimable ha sido el aporte de Alejo Peyret a la prosperidad de nuestro suelo, de recto proceder y de brillante intelecto, dedicó su vida al trabajo de las más nobles causas.
Falleció en Buenos Aires el 27 de agosto de 1902. Sus restos descansan en el cementerio de San José desde el 26 de noviembre de 1995.
