Sobre el comportamiento de la manga de insectos, aseguró: “Son insectos adultos que están bajando a la tardecita en distintos lugares, pero no están reproduciéndose, comen, descansan y siguen su viaje. Pueden hacer vuelos de hasta más de 100 kilómetros dependiendo de las condiciones”.
“Lo que no nos queda claro es si van a entrar a la provincia de Entre Ríos o si volverán al norte con el viento frío que se dará en los próximos días. En principio parecería que si llegaran a la provincia, entrarían por la zona oeste, de Feliciano hasta La Paz, sujetos a la condición del viento”, indicó al hablar sobre la posible llegada y no descartó que puedan parar en zona urbana. “Pueden llegar a la ciudad, no es que andan solamente en los campos. Se quedan una noche, pero debemos tener presente que no están formando colonias nuevas”.
Acerca del deterioro que podría producirse en los campos sobre los que descanse el grupo de langostas, el ingeniero explicó: “No están causando mayores daños, son muchas, ocasionan deterioro, pero no tanto. Los animales no corren peligro, no resultan dañados por la manga”, y contó que “Senasa, junto a la provincia e INTA formaron un comité de crisis por el que le pedimos a los productores que si ven algo sospechoso informen para disparar esta alarma. Hay un aplicativo de ‘alerta langosta’ o pueden llamar a los teléfonos de las instuticiones, enviar fotos y que les demos precisiones”.
“El 2016 fue el último registro de una entrada de manga de langostas de Paraguay y no generó muchos problemas, pero claro que hay que estar atentos y donde se asientan hacer los controles, aunque suelen parar en lugares inaccesibles así que por eso apelamos a la responsadilidad de los productores”, remarcó Perini, en diálogo con la emisora de El Entre Ríos.
Canales de denuncia
Adriana Saluso, entomóloga, profesional del Laboratorio de Entomología de la EEA Paraná del INTA comentó a El Entre Ríos: “Lo más próximo a Entre Ríos se dio el domingo, que estuvieron a 45 kilómetros” y explicó: “Esta especie es la que causó disturbios en cultivos en la década del 40 ó 50 en Argentina y de ahí quedó registrado como una plaga a la que hay que temerle, pero hoy en día prácticamente no hay reporte de consumo de cultivos sembrados por parte de la langosta, sino que consume vegetación espontánea, en monte y pastizales. De todos modos hay que estar atentos”.“Entre Ríos ha tenido una actitud proactiva, se reunieron los principales centros de investigación y monitoreo y elaboraron un protocolo de acción. Lo que se intenta es difundir la información sobre cómo se produce el desplazamiento de las langostas y al mismo tiempo sensibilizar a productores y cooperativas para que si la detectan hagan su denuncia. Tienen varias vías, lo más práctico sería que cada uno instalara en sus dispositivos una aplicación que se llama alertas senasa y allí tienen una serie de dibujitos, uno de ellos es una langosta y al picar ahí pueden colocar la información respecto al avistaje de este tipo de insectos. También se puede denunciar en las agencias de INTA más próximas o con INTA Paraná a través de mi correo electrónico que es saluso.adriana@inta.gov.ar”, comentó, sobre el modo de abordar la posible llegada de la manga.
Por último, la profesional aseguró: “Si fuese necesario el control químico se debe recurrir al protocolo enunciado por el SENASA que esta disponible en su pagina web y allí tienen el listado de insecticidas que debe utilizarse en cada zona según la vegetación. Puede bajarse de SENASA y colgamos un link en la página web de inta Paraná”.