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Todo parecía dispuesto para que Procesadora Ganadera Entrerriana Sociedad Anónima retomara la producción a inicios de esta semana, sobradamente cumplido el mes de prohibición de vender carne vacuna al exterior y una vez conocidas las nuevas reglas de juego impuestas por el gobierno nacional para comercializar.

A través de datos suministrados por el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), el Poder Ejecutivo distribuyó un cupo exportable de 27.608 toneladas, una cifra que representa la mitad de lo despachado en 2020 y que regirá entre los meses de julio y diciembre de este año.

Un reparto que deja a la compañía de capitales orientales relegada dentro de un consorcio secundario, integrado por 30 empresas que consiguieron un 18 por ciento del total exportable, como parte de un grupo que había logrado posicionarse en los últimos años desde la irrupción de China en el mercado mundial. La última semana, el emblemático frigorífico de la ciudad de San José (Departamento Colón) fue escenario de una reunión cumbre, que congregó a las autoridades de la firma con el intendente Gustavo Bastian y el mismísimo ministro de Producción, Turismo y Desarrollo Económico de Entre Ríos, Juan José Bahillo.

En esa instancia, habían transmitido su “permanente preocupación por la situación que se está atravesando” y “el impacto que dicha medida está ocasionando a las 360 familias”, en referencia a las restricciones implementadas desde mediados del mes de mayo, con la intención de contener la presión sobre los precios.

En respuesta, los funcionarios municipales y provinciales compartieron la preocupación y se comprometieron ante sus directivos a trasladar el planteo al gobierno de Alberto Fernández, en busca de una posible solución para un sector en el que por estos días reina la incertidumbre.
Con el 99 por ciento de su producción destinada exclusivamente a China y sus depósitos “abarrotados” de mercadería sin exportar, la mayor parte del personal de PGE había entrado en “garantía horaria” hasta el 21 de junio, plazo que finamente se verá extendido hasta su paulatina reincorporación para cubrir futuras faenas.

“La idea es empezar a faenar este lunes”, había informado una fuente consultada desde El Entre Ríos al filo del fin de semana, “en principio serían dos faenas por semana de 300 cabezas cada una y veremos de ir subiendo a medida que sea posible, hay que desarrollar nuevamente las ventas a consumo interno”.

Sin embargo, la faena que muchos aguardaban con expectativa para este lunes finalmente no ocurrió. Tampoco sería este miércoles como varios barajaban a modo de plan B, sino que habría que esperar hasta el viernes, una vez agotadas las instancias de negociación con respecto a los cortes de carne autorizados a comercializar. De acuerdo a las nuevas disposiciones gubernamentales, los frigoríficos tienen prohibido exportar siete cortes de carne vacuna considerados “de consumo popular” en el mercado interno, entre los cuales se encuentran: asado de costilla, vacío, matambre, paleta, cuadrada, tapa de asado y falda.

“Nosotros estábamos exportando los huesos y ahora no se puede, sumado al asado y las pulpas que tampoco están permitidas”, confiaron desde la planta sanjosesina, “vemos que mucho porcentaje de la media res quedaría destinado exclusivamente a consumo interno, hoy por hoy muy planchado”.

En tanto, el cupo mensual de exportación para PGE fue establecido en 692 toneladas mediante el Decreto Nº 408/2021, posicionándose así entre los 15 establecimientos cárnicos con mayor capacidad de comercialización a nivel nacional, dentro de un listado oficial que contiene un total de 63 firmas comerciales.
Fuente: El Entre Ríos

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