“Era una cuchilla de carnicero, era tan grande que ya parecía un machete. En el momento que voy en su ayuda, veo cómo este chico logra salvarse gracias a su mochila, y es ahí cuando me meto en el medio, justo cuando es alcanzado por la punta de la chuchilla en la espalda”, describió la docente.
Luego, Yanina dijo que tuvo la oportunidad de dialogar con los agresores: “Ellos buscaban a un tal Flores, y se calmaron cuando les explicamos que en la escuela no hay ningún alumno con ese apellido”.
Visiblemente nerviosa por el segundo acontecimiento de inseguridad vivido en menos de 24 horas –el miércoles también se vieron violentados los alumnos–, la docente aseguró: “Llamé a la policía y en ningún momento me atendieron. Es la primera vez que ocurre un hecho de estas características, incluso cambiamos el horario por seguridad, así ellos ingresaban más temprano, pero ahora con todo esto ya no quieren regresar a la escuela, sobre todo este chico que hoy se salvó de milagros”.
Por último precisó que por la tarde volvería a la Comisaría Séptima, para acompañar al alumno que iba a radicar una nueva denuncia.
