"Puede sonar extraño para los otros poderes. Nadie imagina a una persona interesada en ocupar un cargo en el Ejecutivo mandando una carta dirigida a Bordet ofreciéndose. Pero en la Justicia es de estilo lo que hizo Julio" explicó un abogado del foro paranaense, preocupado por aclarar los alcances del gesto de Federik.
Lo que está fuera de toda discusión es que la misiva es real y también que salió a la luz porque fue filtrada a los medios.
El episodio quedó inscripto en el contexto de la danza de nombres que ya desde hace varios días ganó espacio en la prensa, con vistas a llenar las sillas vacías de la sala de Casación de la capital del citrus.
Sabido es que varios profesionales del derecho han impulsado la figura de Guillermo Mulet, mientras que el Senador Ángel Giano, hombre del oficialismo que integra otro poder del Estado, salió al ruedo promoviendo que la sala esté conformada por abogados del foro concordiense, sutil manera de dejar fuera de la conversación a Mulet.
En el caso de Federik, en virtud de su trayectoria, todo hace suponer que su nombre cuenta con el beneplácito no sólo de muchos abogados y de varios integrantes del STJ sino que también es bien visto en la Casa de Gobierno, aunque esta última preferencia no se haga pública, ya que si así ocurriera ello sería interpretado como una inadmisible injerencia del Ejecutivo sobre la Justicia.
Según han dejado trascender, Federik habría escrito la carta en cuestión porque así se lo solicitaron aquellos que mayor interés tienen en que su figura "prestigie" la flamante sala de casación de Concordia.
Al cobrar estado público, su reacción habría sido de profundo disgusto. "Julio no necesita postularse ni tampoco le hace falta un cargo. Si escribió esa carta es porque se lo pidieron, con el fin de que su figura pueda servir para organizar Casación de Concordia", aclaró un abogado que tiene diálogo directo con él.
