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“Luchamos por nuestros hijos, hoy con Rebord y mañana con Walser”. Así titulaba El Entre Ríos la nota con Rocío y Pilar, dos vecinas del barrio San Francisco de Colón, en septiembre de 2019. Las elecciones ya habían pasado y era inminente el cambio de mando en el Ejecutivo Municipal. Pero el reclamo no era cuestión de campaña. A muchos les había llevado años animarse a visibilizar lo que les pasaba, y una vez dado el primer paso, habían decidido que la lucha por condiciones de vida dignas atravesaría cualquier color político.

En un año sin elecciones y con los reclamos sociales silenciados por la pandemia, la gente del barrio San Francisco sigue levantando la bandera en defensa de sus necesidades. Rocío se mudó de barrio, pero continúa acompañando en la lucha. Esta vez son Pilar Olivera, Yamina Martínez –a quien ya habíamos entrevistado cuando pidió por una familia a la que habían invadido las cucarachas- y Johanna Villa, quienes reciben a El Entre Ríos.

Como siempre los preocupa los innumerables problemas de salud que les genera tener sus viviendas entre un enorme basural y las lagunas de oxidación. Pero esta vez también hacen hincapié en la falta de seguridad y reclaman la presencia del Estado para poner orden en los conflictos entre vecinos.

El viernes presentaron una carta en el municipio solicitando una entrevista con el intendente, y aguardan respuesta.
Limpieza e inseguridad
“La situación sigue igual. No vamos a negar que hayan arreglado algo del basurero, pero lo han corrido para atrás. Hubo incendios, el barrio se está yendo de las manos. Pero algunos siguen haciendo minibasurales, y no es lo mismo que yo le tenga que decir al vecino lo que tiene que hacer a que venga el Estado. Hay personas que lo están haciendo complicado, entonces uno necesita la presencia del Estado y que ayude a los vecinos que sí queremos salir adelante”, comienzan diciendo.

“El barrio está abandonado en todos los sentidos. En la limpieza, en la inseguridad. Pese a la pandemia, podrían haber venido con barbijo a golpear la puerta y desde la vereda preguntarnos si sabemos quién tiró la basura para que se incendie el zanjón. Si tanta veces lo recorrieron en tiempo de campaña, podrían venir ahora”, comienzan diciendo. Y reclaman la presencia de la máxima autoridad de la ciudad: “Cada una de las veces que se prendió fuego el basural hemos esperado que el intendente aparezca. Queremos sentarnos con él y que nos dé las respuestas que necesitamos”.
La actividad que llevó al barrio el 29 de agosto a José Luis Walser conmemorando el Día del Árbol, no fue bien recibida por algunos vecinos: “No puedo entender cómo el intendente vino con su hijo a plantar un arbolito, siendo que yo tengo que estar todos los días cuidando que mi hijo no se vaya a las piletas de decantación porque no hay resguardo. Que ponga un sereno a vigilar. El otro día andaban buscando a un tipo que se peleó con otro y se escondió ahí, que es una boca de lobo”, señala una de las entrevistadas.

“Se agarran a trompadas, se tirotean”, dicen describiendo algunos de los episodios desagradables que les toca presenciar, y pese a conocer que la seguridad no es competencia del municipio, señalan que “se puede trabajar en apoyo a las familias”. Además, aseguran que “la Policía no quiere venir más al barrio, llamamos y no vienen”.
Sin títulos de propiedad
“No nos cobran impuestos porque no quieren darnos los títulos de las casas, tenemos papeles de cesión, precarios. Nadie tiene título. Si titularizarían todo el barrio nos podrían cobrar. Así como pagamos internet, el cable, la luz, podemos pagar un impuesto ¿Por qué no nos dan la responsabilidad civil de titularizarnos las casas? Cobren impuestos y vamos a reclamar tres veces más que ahora que no estamos aportando nada. Nos hacen creer que uno no vale porque no aporta. Nos tienen en la ignorancia y la clandestinidad y así sienten que no están obligados a hacer las cosas”.

“¿Por qué nuestros hijos tienen que seguir criándose entre el basurero y las piletas? Y nos dicen que sabíamos dónde veníamos a vivir, pero es mentira, y si hubiésemos sabido era con la mentira de que a los seis meses nos sacaban esto de al lado”.

Finalmente, hablan del miedo a involucrarse de los vecinos, de los intereses políticos de algunos y de la falta de interés de otros. Si bien son acompañadas por otras familias en esta lucha, “nos gustaría que mucha gente se sume a nosotros, que el barrio sienta más apoyo. Necesitamos tirar para el mismo lado”, sostienen.

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Reunión abierta
Luego de la entrevista con los vecinos, El Entre Ríos se trasladó al municipio para recoger la palabra del Ejecutivo.

“El viernes recibimos una nota en la intendencia por reclamos de vecinos del San Francisco. El intendente José Luis Walser ha tomado la decisión de concurrir al barrio y realizar una reunión abierta donde se puedan expresar y comenzar a definir acciones”, dijo el secretario de Gobierno, Pablo Trevisan.

“Es cierto que el barrio viene con muchas necesidades, con una complejidad grande social y ambiental, con las piletas de oxidación que llevan más de 30 años ahí y estaban prácticamente fuera de funcionamiento; y el basural, que es donde más pusimos el acento y creo que se ha notado”.

En ese sentido, Trevisan detalló: “Trabajamos en un relleno sanitario, es decir hay mucha menos basura expuesta. En el sector oeste del basural, donde hay una línea de casas, había una laguna en la que se fue rellenando con los escombros de la Escuela Normal y se está haciendo una calle que sea perímetro, para que las viviendas queden alejadas”.

“Este fin de semana se comenzó con el plantado de árboles; son más de 200 los que pensamos incorporar, 50 de ellos van por el límite, haciendo una cortina natural para evitar los olores y demás cuestiones propias del lugar. Ha cambiado mucho el aspecto, pero queda mucho por hacer”, agregó.

En cuanto a las piletas de decantación, el funcionario indicó que “se comenzó con el desmalezamiento en la parte baja. El trabajo no va al ritmo que quisiéramos, pero está planificado continuarlo”.

“Respecto a la refuncionalización de la pileta, que es la medida de fondo que habría que tomar, más allá de un potencial traslado, eso requiere fondos y hoy no los tiene el municipio. En el último pedido a Provincia, que se trasladó a Nación y al Enohsa, hablamos de 20 millones de pesos para comenzar ese proceso y que tengan los niveles de oxigenación que corresponde”, concluyó.
Sobre los llamados y las denuncias
El Jefe de Policía Departamental Colón también dijo lo suyo: “No hemos recibido denuncias. El otro día, a una persona que recibió una herida de arma blanca se lo llevó al hospital, después se lo invitó a hacer la denuncia y no quiso. También se trajo a una persona por una discusión y quedó detenido por una contravención”.

El Comisario Mayor Sergio Goró, asegura que “denuncia firmada, que alguien haya venido acá por algún problema, no tenemos”.

A su vez, afirma que suelen realizar recorridas preventivas, “no todas las veces podemos pasar porque tenemos otros barrios también, pero acudimos ante los llamados”. Y se mostró abierto al diálogo: “Sería importante hablar con quienes supuestamente han sido perjudicados, para tener una mejor visión”.

“Tenemos desde hace años un problema con el número 101 que es gratis, e hicimos reclamos a Telecom pero nunca nos han dado una solución. De todos modos, está el número del Jefe de Calle, que es el 0343 4602198”.
Fuente: El Entre Ríos

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