El relevamiento presta atención a 4 indicadores. Los "Coliformes fecales", que no deben exceder una media logarítmica de 200 UFC / 100 ml; la bacteria Escherichia coli, cuya media geométrica no debe superar los 126 UFC / 100 ml; los Enterococos, que no deben sobrepasar los 33 UFC / 100 ml; y, por último, las floraciones algales.
Las playas que sale peor parada en la margen argentina es Puerto Yeruá. Allí, los coliformes y la Escherichia coli cuadruplican lo tolerable, al ubicarse en 823 y 401 respectivamente. Más grave aún resulta la presencia de Enterococos, que ascienden a 1125 cuando lo permitido son apenas 33.