Está imputado por dos hechos de robo. El primero en el año 2011 cometido en un local de Seguros de la ciudad de San José, y el segundo en el año 2012 por el robo agravado por el uso de arma de fuego en una tienda ("Nitax") de Villa Elisa. En ambos casos actuó con un cómplice, de apellido García. En el segundo hecho está imputado también un remisero que hizo el traslado desde Colón a Villa Elisa.
Por esos hechos estuvieron detenidos por unos meses y luego se les dictó prisión domiciliaria. Menos de un mes más tarde –el 12 de noviembre de 2012- Coronel violó la prisión domiciliaria que cumplía en una vivienda de El Brillante; en tanto su cómplice se fugó en la misma fecha.
El mismo día se decretó la rebeldía y se ordenó la detención de ambos. García fue detenido en Santo Tomé (Sta. Fe) en el marco de un allanamiento por robo calificado de automotor y tenencia de arma de fuego de uso civil. Actualmente cumple condena en la provincia de Santa Fe.
En dos oportunidades se intervinieron líneas telefónicas a través de la Dirección de Captación de Comunicaciones de la CSJN y se autorizó a la División Captura de Prófugos de la Policía Federal que se hiciera cargo de las escuchas en tiempo real, para procurar la captura de Coronel. Las tareas dieron resultado y el 2 de marzo de 2017 se logró su captura en el barrio de La Boca, quedando a cargo del Juzgado Nacional en lo Criminal Nº 13 de Capital Federal, ya que también ese Juzgado había emitido una orden de captura.
El 16 de junio último el Tribunal Oral Nº 13 de Capital Federal condenó -en el marco de un juicio abreviado- a Mauricio Adrián Coronel a la pena de 3 años de ejecución condicional (por los delitos de amenazas simples en concurso ideal con lesiones leves agravadas por el vínculo, concursado realmente con los delitos de robo agravado por uso de llave verdadera y amenazas).
Días pasados la Fiscalía pidió su traslado desde el Penal de Marcos Paz, y finalmente hoy a la mañana tuvo lugar la audiencia en la que el fiscal Alejandro Perroud detalló los hechos y las pruebas reunidas en las causas, valorando que en ambas fueron reconocidos en rueda de personas y señalando todas las circunstancias que indicarían que en el caso de recuperar su libertad el imputado no se sujetaría al proceso. En función de ello, solicitó la prisión preventiva por el término de 60 días.
La defensa –ejercida por el Dr. Carlos Scelzi, solicitó la libertad de su asistido cuestionando que existiera peligro de fuga, consideró además como excesivo el plazo.
La magistrada hizo lugar a lo interesado por la Fiscalía, coincidiendo en la verificación de peligro de fuga y ordenó la prisión preventiva de Coronel por el término de 40 días, durante los cuales permanecerá alojado en la Unidad Penal Nº 4 de Concepción del Uruguay a la espera del juicio oral.
Con un cuchillo de frigorífico
El 11 de julio de 2011, a las 08:50, los coimputados Luciano Marcelo García y Mauricio Adrián Coronel, ingresaron al local de comercialización de seguros sito en calle San Martín 1344 de la ciudad de San José. A cara descubierta y portando García entre sus ropas un cuchillo del tipo "de frigorífico" con cabo color blanco y su hoja tapada con un papel que exhibió a las personas que se encontraban presentes, les exigieron la entrega de dinero a las dos mujeres que se hallaban en el lugar. Se llevaron la suma de 2 mil pesos en billetes de distinto valor, que se encontraba en la caja del comercio y producto del giro comercial del mismo, además de una billetera de cuero de color negro con la suma de 14 pesos, y documentación personal.
La causa quedó caratulada como Robo agravado por el uso de arma.
Se hicieron pasar por clientes
El segundo hecho que se les imputa tuvo lugar a primera hora de la mañana del 16 de agosto de 2012, cuando Mauricio Adrián Coronel y Luciano Marcelo García se trasladaron desde Colón hasta de Villa Elisa en un remís Renault Clio 2 color gris. Aproximadamente a las 08.50, ingresaron a una tienda de hilados y anexos que gira bajo la razón social de "Nitax" sito en Av. Urquiza 1782, mientras el remisero se quedó esperando afuera en el interior del auto estacionado frente a un local de venta de calzados, sobre calle Schroeder.
La dueña del comercio se encontraba atendiendo su tienda junto a su hija, cuando Coronel y García ingresaron al local, en principio haciéndose pasar por clientes. El primero consultó por ropa que estaba a la venta, por lo cual la comerciante lo hace pasar al fondo, mientras su cómplice se quedó con la señora frente al mostrador y en un momento extrae un arma de fuego de una mochila de color gris, diciéndole "esto es un asalto, dame todo lo que tenes". En ese instante, García le saca el tambor al arma y le muestra a su hija que tenía dos proyectiles. Acto seguido, la despojan a su madre de dos alianzas de oro, dos anillos de plata y dos celulares.
Posteriormente las hacen pasar al interior de su domicilio, el cual se comunica con el negocio. Se dirigen a las habitaciones, revuelven los roperos y todo los muebles a su paso, preguntando todo el tiempo a las víctimas dónde estaba la plata, mientras que García apuntaba a la más joven de las mujeres, diciéndole que si no le entregaba el dinero la mataban. Ante tal situación, su madre les entregó la suma aproximada de 10 mil pesos, mientras que su hija le entregó la suma de otros 300 que tenía en su billetera. Asimismo, García tomó de un alhajero algunas cadenitas de fantasía y una bandolera color marrón de cuero, la cual tenía la suma de 300 pesos aproximadamente.
Luego, los imputados encerraron a ambas mujeres en el dormitorio de la denunciante, cuya puerta quedó sin llaves, y apuntándolas con el revólver les ordenaron que se queden allí dentro sin dar aviso a la policía por 20 minutos, de lo contrario volverían a matarlas. Ambos se retiraron del lugar por la puerta de la casa particular y huyeron en el mismo remís.
Luego de unos pocos minutos, la denunciante y su hija salieron de la habitación y encontraron dentro del domicilio, tirados al lado de la puerta de salida, la suma de 7 mil pesos, discriminados en billetes de $ 100, suma que se les habría caído a los imputados durante la fuga, dando las damnificadas inmediato aviso a la Policía de Villa Elisa.
Asimismo, según los dichos de la denunciante, en horas de la mañana del día anterior -15 de agosto de 2012- se habían hecho presentes los mismos sujetos en su comercio, donde le consultaron qué a hora abrían el local, comprando en ese momento dos ovillos de lana supuestamente para hacerse gorras, mostrando en ese momento una actitud sospechosa.
Enterado el personal policial, se dispone un operativo a los fines de dar con el vehículo en el que se conducían los imputados, el cual es localizado, y luego de una persecución -aproximadamente a las 10.30- es detenido en Ruta 135 y un camino vecinal, casi a la altura del ingreso a la ciudad de Colón, aproximadamente a 200 metros de calle San Martín, procediéndose a la aprehensión de los tres imputados y al secuestro de diversos efectos relacionados con la presente investigación: entre ellos el arma utilizada.
La causa quedó caratulada como Robo calificado por el uso de arma de fuego.
