Pudiendo afectar tanto a personas como animales, en Colón se registraron varios casos de mordeduras en perros. Mientras algunos llegaron a tiempo con la aplicación del suero, para otros resultó mortal.
Buscando refugio, las yararás pueden refugiarse entre la leña, las casillas del medidor de gas, debajo de desk, cuevas o madrigueras, donde pueden picar al sentirse invadidas.
“El perro es un animal curioso”, señala como característica que los expone en forma particular. “La mayoría de las mordeduras se registran en el hocico, dejando una marca muy notoria de los colmillos, produciendo una hemorragia, un edema importante y una necrosis de los tejidos, por enzimas del veneno. Si esto avanza, puede provocar una hemorragia sistémica al afectar los capilares sanguíneos”.
La vía de aplicación más efectiva es la endovenosa, por lo que se aconseja acudir al veterinario.
Como medidas preventivas, hay que “evitar los pajonales cerca de la casa y mantener el pasto bien corto”. También, el veterinario comenta que los teros suelen espantar a las serpientes y que algunas plantas las repelen, como la sansevieria (lengua de suegra), caléndula, cebolla, ajo o hierba de limón.
Ante la aparición de una yarará, comunicarse al siguiente número del área de Inspección Municipal: (3447 423560), durante las 24 horas.
