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Partió este lunes hacia Croacia, donde afrontará una serie de amistosos preparatorios, la delegación argentina de Vóley Femenino, que competirá en la última semana de julio en los Juegos Olímpicos de Tokio.

En sus filas se encuentra la entrerriana Sabrina Germanier, frente a su primera experiencia olímpica. Con apenas 22 años, la oriunda de Colón es una de las dos armadoras que componen el plantel orientado por Hernán Ferraro.

Recientemente anunciada como incorporación de Les Louves de la Segunda división de Francia, Sabrina deja atrás un exitoso ciclo en Boca Juniors, donde fue multicampeona a nivel metropolitano y nacional.

La confirmación de que estará en Tokio y el salto a una de las ligas más importantes de Europa se dieron en un puñado de días. “Estoy viviendo momentos soñados”, resumió, en el comienzo del diálogo con El Entre Ríos, antes de emprender viaje rumbo a Croacia.

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“Empecé hace dos meses el proceso con la Selección y se dio todo de la mejor manera. Estoy con ganas de cumplir un sueño y aprovechar al máximo la experiencia. En Tokio la zona es muy difícil, con muchas potencias, pero confío que vamos a hacer un buen trabajo”, comentó en referencia a los JJOO que para “Las Panteras” arrancarán el 24 de julio a las 23 de nuestro país, cuando se enfrenten a Estados Unidos.

Al mismo tiempo empieza a palpitar su llegada al Viejo Continente. Sobre su fichaje con Les Louves opinó: “Es un club de Liga A2 que busca ascender. Viene de estar cerca en los últimos años. Se armó un gran equipo, con muchos refuerzos y eso fue lo que me convenció, el proyecto de ascenso. Mi idea de irme no sólo era por lo económico sino también por lo deportivo”.

Así se cierra una inolvidable etapa en Boca Juniors, club del cual demostró siempre ser fanática. Esto presumía una especie de contraste entre tanta alegría junta, sin embargo, con madurez, la surgida en Club La Armonía, fue contundente: “No me costó tomar la decisión de emigrar. No me suelen costar las decisiones. Decidí en un día irme a Buenos Aires a jugar a Boca. Siempre que sea algo que me haga mejor y sirva para elevar mi nivel lo haré. Tengo el apoyo de mis padres, es un gran respaldo tener su opinión”. Y agregó: “En Boca di un gran salto de calidad, competí en gran nivel, gané torneos. Boca fue demasiado importante, sobre todo para haber llegado a la Selección”.
Colón mantuvo sus dos plazas olímpicas
Al igual que en Beijing 2008, Londres 2012 y Río de Janeiro 2016, la ciudad de Colón tendrá dos representantes olímpicos en Tokio 2020, con el debut de Sabrina Germanier como parte de “Las Panteras” y el histórico Rodrigo López -quinta participación consecutiva- en Ciclismo de Ruta en los Paralímpicos que se iniciarán a fines de agosto.

Rodrigo cuenta con dos medallas y varios diplomas en su palmarés olímpico, transformándose en una fija para la delegación argentina. Su bautismo fue en Atenas 2004, donde logró emular a Daniel Farabello, que en Atlanta 1996 compitió junto a la Selección de Básquet.

En Beijing 2008 el otro exponente de la “ciudad paraíso” fue Paolo Quinteros, logrando la medalla de bronce con la Generación Dorada. En Londres y Río de Janeiro quien acompañó a Rodrigo fue otro ciclista, en este caso de montaña, Catriel Soto, quien en esta oportunidad se vio perjudicado por la extensa cuarentena que le impidió en 2020 salir del país a competir y cosechar puntos para el Ranking de la UCI.

Volviendo al básquet, tanto Farabello para Atenas 2004 y Quinteros para Londres 2012, formaron parte de la preparación de la Selección de Básquet pero quedaron fuera de la nómina definitiva.
Fuente: El Entre Ríos

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