En el plantel dirigido por Hernán Ferraro se encuentra la entrerriana Sabrina Germanier, que luego de las olimpiadas se incorporará a Les Louves de la A2 de Francia, luego de un exitoso paso por Boca Juniors.
Será el debut olímpico para la armadora de 22 años oriunda de Colón que se formó en Club La Armonía y jugó dos veces la Liga Argentina para Social y Deportivo San José, antes de dar el salto hacia la entidad de la Ribera.
El profesor Horacio Moreira, referente del vóley de la ciudad y el departamento Colón hace varias décadas, fue su primer entrenador en La Armonía y no ocultó su felicidad por este logro de Sabrina: “A la familia del vóley de la ciudad nos invade un orgullo muy grande”.
Quien más que Moreira conoce a Sabrina, que no solamente la dirigió en su proceso formativo en el Minivóley (de los 4 a los 11 años) sino que también entrenó a sus papás. “Mi recuerdo me lleva a Soledad y Ricardo. Ella era muy buena jugadora, con buen saque y defensa, y se destacaba en el equipo de la categoría 1976. Ricardo era un jugador de gran físico y mucha potencia. Fue una de las tantas parejas que se formó a partir del voley del club, en la época que todas las categorías compartían viajes”, recordó Moreira.
Y agregó: “Tengo el recuerdo que trabajaban a la vera del puente y Sabrina, muy chiquita, ya estaba rebotando una pelota de vóley contra un frontón. Hace un tiempo Ricardo me mostró un diploma de ella de un Encuentro de Minivoley, categoría Bajitos, del año 2003. Así que tenía 4 años cuando se puso por primera vez la camiseta de La Armonía”.
El contacto desde tan chica con la pelota y la pasión por este deporte que le transmitieron sus papás fue una combinación perfecta para que Sabrina adquiriera rápidamente los conceptos. “Heredó la habilidad de su mamá y desde una edad muy temprana empezó a coordinar tiro y abarajo. Tuvo mucho rodaje en competencias provinciales y nacionales a lo largo de su carrera”, explicó Moreira, a la vez que sostuvo: “Desde chica sobresalió y fue capitana. Por su juego y por hablar lo justo y necesario. Siempre fue muy inteligente para repartir juego”.
Y después de dio todo muy rápido para la armadora, que debutó en la Liga Argentina para Social y Deportivo San José y enseguida, a los 17, fue captada por Boca Juniors. “Era su sueño, siempre fue muy bostera”, mencionó su primer entrenador.
A la par que empezaba a dar vueltas olímpicas –en torneos metropolitanos y nacionales- con el “Xeneize”, Sabrina inició su proceso con la Selección Nacional Menor y afrontó varias competencias internacionales. “Quizás le faltaron más minutos en Boca, pero siempre fue tenida en cuenta por el cuerpo técnico argentino”, agregó Moreira.
“Alegrías como esta de Sabrina, ganar algún que otro campeonato y disfrutar de los amigos de tantos años son las satisfacciones que te deja el vóley. El que se identifica con él, es un loco del vóley”, concluyó Moreira, quien agregó un dato no muy tenido en cuenta por muchos: “Sabrina no será la única jugadora que pasó por La Armonía y estará en Tokio. También Ana Gallay, que fue campeona provincial en Primera en 2009, título que le valió al club jugar por única vez la Liga Argentina, en fusión con San Lorenzo, al año siguiente”.
